El cardenal uruguayo dialoga con senadores y reitera su oposición a la eutanasia

El cardenal de Uruguay, Daniel Sturla, en una fotografía de archivo. EFE/ Sebastian Astorga

Montevideo, 30 sep (EFE).- El cardenal uruguayo, Daniel Sturla, fue recibido este martes por los integrantes de la Comisión de Salud Pública de la Cámara de Senadores, donde reiteró su oposición a la ley que busca legalizar la eutanasia, la cual se encuentra allí en estudio tras haber sido aprobada en Diputados.

Tras el encuentro, el arzobispo de Montevideo dialogó con la prensa e indicó que la posición de la institución que representa es «en defensa de la vida» y contraria al proyecto.

«Yo lo que expuse es que el principal problema del Uruguay es un problema espiritual que tiene que ver con el sentido de la vida y con la desvalorización de la vida humana que se da entre nosotros. Este proyecto, en lugar de contribuir a valorizar la vida, contribuye a pensar que hay vidas descartables», enfatizó.

Asimismo, dijo que su postura fue recibida «con mucho respeto» y añadió que la ley que se está tratando tiene cosas a cambiar, incluso antes de ser votada, como -por ejemplo- su nombre.

«Yo discrepo radicalmente que la Ley de Eutanasia se llame de Muerte Digna. Creo que eso da una confusión a la gente. ¿Cómo clasificamos las otras muertes? Creo que eso había que cambiarlo», dijo Sturla, quien apuntó que el nombre debería ser Ley de Eutanasia para llamar a las cosas por su nombre.

Finalmente, dijo que la respuesta ante problemáticas como las enfermedades terminales deben ser los cuidados paliativos.

El pasado 13 de agosto, Uruguay dio el primer paso hacia la regularización de la eutanasia, luego de que la Cámara de Representantes aprobara por mayoría el proyecto de ley ‘Muerte Digna’.

Tras un debate que se extendió por más de doce horas, 64 diputados alzaron su mano para votar a favor, mientras que otros 29 se expresaron en contra.

De esta forma, el proyecto fue aprobado y pasó a la Comisión de Salud de la Cámara de Senadores, integrada por nueve legisladores. En caso de que allí sea aprobado, pasará al pleno de la Cámara Alta para ser votado.

El proyecto aprobado busca garantizar el derecho a «transcurrir dignamente el proceso de morir» mediante la despenalización de la eutanasia en los mayores de edad psíquicamente aptos que atraviesen la etapa terminal de enfermedades incurables e irreversibles o que padezcan por ellas «sufrimientos insoportables».