Melilla, 17 abr (EFE).- La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Cautivo de Medinaceli y María Santísima del Rocío ha cumplido en la noche de este Jueves Santo en Melilla la tradición de liberar un preso en su estación de penitencia, que lleva realizándose de manera ininterrumpida desde 2001, hace casi un cuarto de siglo.
Este beneficio ha recaído en N.M.A., un vecino de Melilla que fue condenado por el Juzgado de lo Penal número 1 de la ciudad autónoma como autor de un delito de atentado a la autoridad a una pena de prisión de tres años y un día y que llevaba en prisión desde el 18 de septiembre de 2023.
Tras haber sido seleccionado como el más adecuado por el juez de Vigilancia Penitenciaria, N.M.A. ha sido liberado casi un año y medio antes de cumplir por completo su condena en un acto cargado de emoción, ante las principales autoridades civiles de Melilla y cientos de melillenses que, como siempre, han abarrotado la Avenida Juan Carlos I.
Allí, ante la tribuna principal, situada ante la Iglesia del Sagrado Corazón, las dos imágenes de la cofradía que salen en procesión este Jueves Santo se han situado en paralelo para la lectura del auto de liberación, en la que una letrada de la Administración de Justicia ha constatado que N.M.A. cumple los requisitos para la suspensión de la pena.
El preso, presente con el rostro tapado por la túnica morada de la cofradía, ha escuchado con atención tanto la lectura del auto como las palabras de la fiscal Ana Vanesa Navas Márquez, que ha subrayado que la liberación del preso “es una manifestación clara del equilibrio que sustenta la balanza de nuestra Justicia”.
“Por un lado, es firme y contundente a la hora de perseguir delitos y establecer una condena como la que cumple este interno del Centro Penitenciario de Melilla, pero por otro lado realiza una función de reinserción social, dando una segunda oportunidad a esta persona”, ha agregado la fiscal para aconsejar al reo liberado que la aproveche.
También ha tomado la palabra el vicario episcopal de Melilla, Eduardo Resa, que ha recordado que el Jueves Santo “es el día del amor fraterno, el día de la caridad y de la misericordia más grande”, y ha confiado en que N.M.A., el preso número 25 que libera el Cautivo en la ciudad autónoma, corresponda con ella.
“Hoy las manos del Cautivo están atadas, pero las tuyas están libres”, ha dicho al preso liberado, que será tutelado a partir de ahora durante un año por la propia cofradía y el Voluntariado Cristiano de Prisiones, que le facilitarán la búsqueda de empleo y otras necesidades relacionadas con la vivienda, gestión de documentación o tratamientos médicos.
Acto seguido, se ha producido uno de los momentos más emotivos de la noche, cuando N.M.A. ha tenido el honor de dar el toque de campana para que los hombres de trono del Cautivo lo elevaran al cielo, un gesto que han emulado segundos después en el trono de la Virgen del Rocío.
Tras saludar a las autoridades, entre las que estaban el presidente de Melilla, Juan José Imbroda, la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, y el comandante general, Luis Cortés Delgado, el preso, ya en libertad, ha seguido la procesión como un nazareno más junto al hermano mayor de la Cofradía del Cautivo y presidente de la Agrupación de Cofradías de Melilla, Gregorio Castillo. EFE