Bruselas 27 abr (EFE).- El comisario europeo de Defensa, Andrius Kubilius, dijo este domingo que Rusia se opone al ingreso de Ucrania en la OTAN por miedo a que la alianza militar defienda al país de futuros ataques rusos.
“Rusia exige ‘no OTAN’ para Ucrania. No porque teman una ofensiva antirrusa de la OTAN desde territorio ucraniano, sino porque temen que la OTAN defienda a Ucrania contra la próxima agresión de Rusia”, dijo el comisario en un mensaje en redes sociales, añadiendo que esta oposición “facilita a Rusia la planificación de su próxima agresión”.
En las últimas horas, Rusia ha proclamado la liberación de la región de Kursk tras más de ocho meses de ser invadida parcialmente por el Ejército ucraniano y se ha mostrado dispuesta a negociar directamente la paz con Ucrania, algo que no ocurría desde marzo de 2022.
Sin embargo, Moscú ha pedido garantías de que Kiev no se unirá a la OTAN y de que Ucrania se mantendrá neutral en cualquier acuerdo de paz, según declaró el viceministro de Asuntos Exteriores ruso, Alexander Grushko, a medios rusos el pasado mes de marzo.
A su vez, ‘The Wall Street Journal’ aseguró recientemente que Estados Unidos ha propuesto que Ucrania reconozca como territorio ruso la península de Crimea anexionada por el Kremlin en 2014, renuncie a una futura membresía en la OTAN y acepte el control de Washington sobre la mayor central nuclear de Europa, Zaporiyia, ocupada por Rusia y alrededor de la cual se crearía una zona neutral, como condiciones para lograr el alto al fuego.
Sin embargo, la viceprimera ministra ucraniana, Yulia Sviridenko, afirmó que el país “nunca reconocerá la ocupación de Crimea” y añadió que Ucrania no firmará la paz si no se le ofrecen garantías de seguridad sólidas como alternativa a su ingreso en la OTAN.
Los presidentes de Estados Unidos y Ucrania, Donald Trump y Volodímir Zelenski, respectivamente, se encontraron este sábado en Roma durante el funeral del papa Francisco para continuar con las conversaciones sobre los esfuerzos de paz.
El presidente ucraniano calificó la reunión como potencialmente “histórica” y la Casa Blanca declaró que fue un encuentro “muy productivo”.