Sídney (Australia), 15 sep (EFE).- El banco ANZ, el cuarto mayor de Australia, recibió este lunes una multa récord de 240 millones de dólares australianos (136 millones de euros) por conductas «inaceptables» en operaciones de bonos del Gobierno federal y por «irregularidades generalizadas» que afectaron a unos 65.000 clientes.
La Comisión Australiana de Valores e Inversiones (ASIC, en inglés) informó este lunes de la sanción, acordada con la entidad pero pendiente de aprobación judicial, que incluye 125 millones de dólares australianos (75 millones de euros) por una operación del 19 de abril de 2023 en la que ANZ ayudó a colocar 14.000 millones en bonos soberanos y donde reportó datos de forma errónea, con riesgo de reducir la financiación disponible para el Ejecutivo.
«ANZ ha traicionado repetidamente la confianza de los australianos», denunció hoy el presidente de ASIC, Joe Longo, en un comunicado.
«Las sanciones totales en estos casos son las mayores anunciadas por ASIC contra una sola entidad y reflejan la gravedad y el número de infracciones, la vulnerabilidad en la que ANZ ha colocado a sus clientes y la reiterada incapacidad para corregir problemas cruciales», añadió.
Según Longo, «los bancos deben contar con la confianza de los clientes y del gobierno» y este resultado «demuestra un desprecio inaceptable por esa confianza, fundamental para el sistema bancario».
La multa se dio a conocer casi una semana después de que la entidad anunciara que eliminará unos 3.500 puestos de trabajo de aquí a septiembre de 2026, como parte de un plan de reestructuración interna que busca simplificar su funcionamiento y reducir costes.
Australia and New Zealand Banking Group (ANZ) es uno de los cuatro principales grupos financieros de Australia, y tiene su sede en Melbourne, en el estado de Victoria (sur).
La entidad opera en más de 30 mercados a nivel internacional, con una fuerte presencia en Australia, Nueva Zelanda y la región de Asia-Pacífico, además de oficinas en Europa y Norteamérica, emplea a más de 40.000 personas en todo el mundo y presta servicios a unos ocho millones de clientes.