Lima, 18 jun (EFE).- El presidente del Consejo de Ministros de Perú, Eduardo Arana, dijo este miércoles que el Ejecutivo no va a «atizar» el «enfrentamiento» en el Ministerio Público y «politizar» esa situación, tras ser consultado sobre el intento de la exfiscal general Patricia Benavides de retomar su cargo y la negativa de la actual fiscal de la nación, Delia Espinoza.
En una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Arana comentó que la crisis institucional en el Ministerio Público ha generado una creciente desconfianza ciudadana y que esas tensiones perjudican la imagen de la Fiscalía como órgano autónomo.
Por ese motivo, el primer ministro propuso utilizar el Consejo de Reforma del Sistema de Justicia, encabezado por la mandataria, Dina Boluarte, como «un buen espacio para poder conversar y delimitar, de manera cordial, los inconvenientes».
El Ejecutivo está dispuesto a intervenir en calidad de facilitador, si así lo permiten las otras partes involucradas, afirmó Arana.
La polémica en la Fiscalía estalló el pasado viernes cuando la Junta Nacional de Justicia (JNJ), el máximo órgano de la judicatura, decidió anular la destitución de la exfiscal general Patricia Benavides, investigada por presunta corrupción, y disponer su reposición en el cargo, a pesar de que Delia Espinoza fue elegida como fiscal de la nación en octubre pasado.
Benavides fue denunciada como presunta líder de una red criminal al interior del Ministerio Público y destituida por las presuntas interferencias en la investigación fiscal abierta contra su hermana y jueza, Enma Benavides.
No obstante, la Junta de Fiscales Supremos ratificó este miércoles que la elección de Espinoza como fiscal general, por un periodo de tres años, se encuentra vigente.
En un pronunciamiento compartido a través de la red social X, la Junta de Fiscales, que es el órgano encargado de designar al Fiscal de la Nación (general), aclaró que Benavides fue destituida el año pasado tras investigaciones por presunta corrupción abiertas en su contra.
En mayo de 2024, la JNJ, integrada entonces por otros magistrados, declaró infundado el recurso de nulidad presentado por Benavides, tras lo cual la destituyó y dispuso la cancelación de su título.
El lunes pasado, Benavides intentó ingresar al despacho de la Fiscalía de la Nación para retomar el cargo, lo que no permitieron funcionarios y la propia Espinoza, quien denunció que se estaba «llevando a cabo un golpe a la democracia».
La actual fiscal general dijo que este hecho «parecería el primer paso de un golpe al estado democrático del país», al tiempo que advirtió que el Ministerio del Interior le podía retirar el resguardo que le corresponde por el cargo.
Por su parte, el Poder Judicial de Perú informó al día siguiente que el próximo 24 de junio evaluará la petición para imponer una suspensión temporal por 36 meses contra Benavides, como parte de una investigación que se le sigue por la presunta comisión del delito de cohecho pasivo específico y otros.
