Laredo (Cantabria), 4 sep (EFE).- Óscar Guerrero, director del Israel-Premier Tech, aseguró este jueves que el equipo no tiene ninguna duda de que va a seguir en carrera en la Vuelta e insistió en que son una formación deportiva que ha venido a competir, tras una nueva protesta para pedir su expulsión en la salida de la duodécima etapa en Laredo.
«Nosotros lo hemos dicho claro, no tenemos ninguna duda que vamos a seguir en carrera. Me he hartado de decir que somos un equipo deportivo, que ha venido aquí a competir y estamos compitiendo, no hay más que ver los resultados de la primera semana y cómo está en la general. La organización conmigo no ha hablado nada», afirmó.
Guerrero apuntó que «es lícito que la gente proteste», pero pidió «que sea pacífica»; lamentó «la vejación» tanto física como verbal que están sufriendo los miembros de su formación y confirmó que el dueño, Silvan Adams, empresario canadiense próximo al primer ministro israelí Banjamin Netanyahu, está acompañando al equipo.
«Ayer vino en el coche conmigo, yo quería que viera la realidad de lo que estamos sufriendo día a día y lo sufrió. Fue muy duro también para él. Lo que más hace es apoyar. Ve la tensión que hay, el día a día cómo está y eso es muy triste. Ve cómo a los corredores les cuesta mucho cada día motivarse, levantar la cabeza y competir. Pero esto es un deporte, somos luchadores, un deportista nunca, nunca abandona, nunca levanta el pie. Nunca hemos hablado de política en este equipo. Llevamos años con este proyecto y se ha hecho un gran esfuerzo, ahora es más grande, pero la mentalidad es la misma, hacer ciclismo», apuntó.
Guerrero admitió que en la etapa de ayer, cuyo final en Bilbao fue neutralizado a tres kilómetros de la meta por las protestas, pasaron cierto miedo y que él hizo maniobras imprevistas para evitar algunos puntos del recorrido.
«Tenía miedo de que cuando pasáramos los coches tuviéramos agresiones. A los ciclistas les dije que en principio yo confiaba mucho en el público vasco y que no iban a focalizar con ellos. Al final siempre han sido muy seguidores del ciclismo, han sido un ejemplo en cuanto al ciclismo y así pasó», comentó.
El director del equipo insistió en que la formación no contempla retirarse si persisten las protestas contra su presencia en la Vuelta y dijo que le gustaría que el resto de formaciones se pusiera en su lugar, aunque ha recibido «muchos ánimos de casi todos los directores» y entiende que «no es fácil para ellos».
«Si nosotros abandonamos aquí sabemos que a partir de ahora en cada carrera seríamos objetivo y tendríamos que bajarnos aquí, allí y en todas partes. Al final hay que ser realista, sería el cierre del equipo y qué hacemos con las 180 familias que estamos trabajando duro para hacer este deporte. Nosotros esperamos que a partir de ahora sea diferente. Confiamos y deseamos y tenemos mucha, mucha tranquilidad con toda la seguridad nivel de la organización, la Policía Nacional, la Guardia Civil. Espero que también los equipos y los corredores sientan esa seguridad, que la carrera sea segura y que vaya para adelante y vayamos a Madrid», confió.
Durante la salida de la etapa de hoy se registró una nueva protesta en Laredo, con la concentración de unas 300 personas con numerosas banderas palestinas, pancartas en las que se podía leer «Israel genocida», «Stop genocidio», fotografías de personas fallecidas y gritos de «expulsión de la competición» para que el Israel-Premier Tech deje el pelotón.