El expárroco mallorquín Pere Barceló, condenado nuevamente por abusos sexuales a una menor

Fotografía de archivo del 4/6/2016 de Pere Barceló, el primer sacerdote expulsado de la Iglesia en España por un caso de pederastia. EFE/ATIENZA

Palma, 30 jul (EFE).- El expárroco de la localidad mallorquina de Can Picafort Pere Barceló ha sido condenado por la Audiencia de Palma a dos años y un día de cárcel por abusar sexualmente de una niña de 13 años, en lo que constituye la segunda condena por el mismo delito para el antiguo sacerdote.

Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJIB) este miércoles, el tribunal ha aplicado en su sentencia la atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas, ya que los hechos se produjeron en 2007 y 2008.

Barceló, para quien la Fiscalía pedía una condena de diez años, fue castigado a seis años de cárcel por otro caso de abusos sexuales a una niña a la que reconoció haber violado y fue el primer sacerdote expulsado de la Iglesia en España por agresiones sexuales a menores.

Además de los dos años de reclusión, las magistradas que componen el tribunal obligan al exsacerdote a indemnizar a la víctima con 15.000 euros y le imponen la prohibición de comunicarse o acercarse a menos de 500 metros de ella durante cinco años y medio.

La sentencia condena a la Diócesis de Mallorca como responsable civil subsidiaria en caso de que Barceló no pueda hacer frente a la sanción económica por insolvencia.

Las juezas subrayan que en la vista quedó probado que el sacerdote, en clases de catequesis, tocó los genitales de la niña, que contaba entonces con entre 6 y 8 años. «Se colman las exigencias de verosimilitud en la declaración de la víctima, en cuanto a los hechos que hemos declarado probados», remarcan.

Igualmente, consideran indudable «el hecho de que el procesado se encontraba en una situación de superioridad frente a la niña» y que aprovechó las condiciones y el mobiliario de la sala en que se celebraban las sesiones de formación religiosa para cometer los abusos.

El tribunal concluye que la víctima resultaba especialmente vulnerable tanto por la edad como por la situación en la que se encontraba.

La resolución recuerda que en 2016 la Sección Segunda de la Audiencia Provincial condenó al procesado a seis años de cárcel por agresión sexual continuada a una menor de 10 años, que acudía regularmente a la iglesia para realizar la catequesis y labores de monaguillo, unos hechos que Barceló reconoció y por los que estuvo en prisión.

Frente a la sentencia dictada este miércoles cabe recurso de apelación ante la Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Baleares.

Respecto al primer caso, el antiguo sacerdote fue denunciado ante el Obispado de Mallorca por una joven que aseguró que a finales de los 90, cuando aún era menor, la había sometido a abusos sexuales continuados y a este testimonio se sumó el de otras dos víctimas.

La Iglesia expulsó al por entonces sacerdote, que hasta 2011 ejerció como párroco de Can Picafort, por considerarlo culpable de pederastia, en aplicación de la doctrina de tolerancia cero de Benedicto XVI.