Madrid, 19 mar (EFE).- La Fiscalía ve “chocante” que el juez Juan Carlos Peinado haya citado como testigo el 16 de abril al ministro Félix Bolaños en una pieza separada de la investigación contra Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, y ha criticado nuevamente la “constante oscuridad” con la que dirige la causa.
El fiscal no comprende “en qué medida” el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes “puede contribuir” al esclarecimiento de unos hechos que -reprocha- el magistrado no ha justificado “siquiera sea superficial o mínimamente” para incoar una pieza separada.
Por ese motivo ha recurrido la apertura de esta nueva línea de investigación, abierta por presunta malversación, y que gira en torno al nombramiento, como asesora de Moncloa, de Cristina Álvarez para asistir a la mujer del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Como el fiscal, también Cristina Álvarez ha recurrido la decisión del juez de abrir esta pieza separada y citar al ministro Bolaños, pero lo ha hecho directamente ante la Audiencia de Madrid, según el recurso, al que ha tenido acceso EFE este miércoles.
La Fiscalía argumenta en su recurso que no puede valorar la “utilidad, necesidad y pertinencia” de la declaración de Bolaños, y se pregunta si “debemos suponer” en “un ejercicio de intuición” que su declaración se refiere a hechos acaecidos cuando era secretario general de Presidencia del Gobierno, entre junio de 2018 y julio de 2021.
Y señala, como ya hizo cuando el juez decidió tomar declaración al presidente del Gobierno como testigo en la Moncloa en julio del año pasado, que la citación de Bolaños es una “diligencia de marcado carácter mediático y con clara repercusión extraprocesal, cuya eficacia, utilidad y pertinencia no estaría aun justificada”.
“No decimos que no lo pueda ser, sino que con el marco fáctico y con una total ausencia de argumentación jurídica, la diligencia en cuestión no nos resulta comprensible”, añade el fiscal.
La defensa de Cristina Álvarez, por su parte, defiende que no hay “indicios de irregularidad alguna”, tampoco de malversación, en su nombramiento, y se pregunta qué va a aportar la declaración de Bolaños sobre este asunto.
Alude al “desconocimiento” del juez de los nombramientos de cargos eventuales de libre designación, y explica que el suyo tuvo una “normal tramitación” para cargos de “confianza”, que desempeña tareas de “colaboración inmediata, de carácter logístico y organizativo en el marco de la atención a la esposa del presidente del Gobierno”.
Esto, añade, incluye la gestión de su agenda, el acompañamiento en desplazamientos y la coordinación con los equipos de protocolo y seguridad, entre otras funciones, y, como cargo de confianza, “no necesita acreditar concurso, oposición ni currículum de ningún tipo”.
“Se trata de una clase de cargo de confianza que siempre ha existido para la asistencia a los cónyuges de los anteriores presidentes del Gobierno de la democracia”, reitera, y pone el ejemplo del anterior jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy.
Tampoco habría -según la defensa de Álvarez- malversación en el envío de unos correos relacionados con la cátedra que Begoña Gómez codirigió en la Universidad Complutense de Madrid (UCM), y los enmarca en la gestión de su agenda y, en alguno de ellos, en un “favor personal”.
En su recurso habla de los “continuos y sorpresivos vaivenes” de una causa “caótica”, con “extravagantes prácticas”, como “la costumbre de citar a los investigados primero como testigos”, y plantea subsidiariamente que, en todo caso, el juez no sería competente para investigar estos hechos en la causa de Begoña Gómez.
Al incoar pieza separada, el magistrado decidió investigar por presunta malversación de caudales públicos el nombramiento como asesora de Cristina Álvarez, a su vez también investigada en la rama principal del procedimiento y quien admitió ante el juez que asistía a Begoña Gómez en cuestiones de agenda y seguridad, pero que nunca se sirvió de su cargo en beneficio propio o de terceros.
El juez Peinado incorporó a esta pieza separada el informe de la Secretaría General de la Presidencia del Gobierno con, entre otros, la propuesta de nombramiento de Cristina Álvarez, las funciones encomendadas, y lugar y condiciones de la prestación de servicios, remuneración recibida y aplicación presupuestaria.
También las declaraciones de la propia Cristina Álvarez y del exvicesecretario de Presidencia Alfredo González Gómez, en su caso como testigo y quien citó a Bolaños en su comparecencia al indicar quién era entonces su superior.
Tras su declaración, el juez acordó oír como testigo al ministro Bolaños, a quien interrogará en su despacho oficial el próximo 16 de abril, como permite la ley.
