Ciudad de México, 6 sep (EFE).- Empresas y autoridades españolas y mexicanas se reunieron este lunes en la quinta edición del Foro Hispamex en Ciudad de México para insistir en la necesidad de potenciar «un enfoque climático como estrategia de negocio» para reducir el impacto medioambiental y mejorar la competitividad en un contexto de creciente demanda de los consumidores.
Así lo indicó durante la inauguración, María Peña Mateos, consejera Económica y Comercial de la Embajada de España en México, donde también advirtió de que la sostenibilidad ha sido «desplazada del centro del relato» por un proteccionismo nacional, haciendo que la preocupación por el medioambiente o la inclusión social pase a un segundo plano.
Esto, explicó Peña, hace que se pueda perder capacidad «competitiva» en un mercado en el que los consumidores cada vez tiene mayor conciencia ambiental.
Con motivo de la celebración de diez años de la firma del Acuerdo de París, se remarcó la necesidad de fortalecer la economía circular y la gestión efectiva de los recursos para cumplir los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) de la Agenda 2030, de los cuales México ha alcanzado el 70 % y España el 81 %, informó Ismael Ortiz Fernández, de la Unidad de Inteligencia Económica Global de la Secretaría de Economía de México.
Ortiz agregó que a nivel mundial estos objetivos no han superado el 17 %.
En este sentido, Ramón Jáuregui, presidente de la Fundación Euroamérica, lamentó que se dé mayor importancia a la rentabilidad y a los beneficios a corto plazo que a la sostenibilidad.
“La sociedad está abiertamente reclamando comportamientos medioambientales y sin embargo en el ámbito social cabe decir que no es igual. No se está avanzando de igual manera en cuestiones sociolaborales o de negociación colectiva, que en el terreno de la llamada sostenibilidad empresarial (…) Siempre he creído que el avance en la política de la sostenibilidad reclamaba estímulos fiscales o de políticas públicas”, señaló Jáuregui.
Por otro lado, empresas mexicanas expresaron que a la inversión de las compañías nacionales y extranjeras se les debe de acompañar de políticas públicas centradas en la adaptación de infraestructuras a las situaciones climatológicas como tratamiento y la reutilización de agua para poder gestionar el estrés hídrico o el impacto de los huracanes en las costas de la república.
De igual manera, destacaron la importancia de tener unas políticas adaptadas a cada región en particular y continuar aplicando los estándares internacionales más exigentes en materia climatológica.
Con una inversión acumulada de más de 70.000 millones de euros de empresas españolas en México y 33.000 millones de euros de inversiones mexicanas en España, este foro busca reforzar los lazos económicos y estratégicos entre ambos países, creando oportunidades para que empresas de ambos lados del Atlántico colaboren en iniciativas sostenibles.