Buenos Aires, 3 jun (EFE).- Pablo Grillo, el fotógrafo argentino herido de gravedad por las fuerzas de seguridad mientras cubría una protesta de jubilados el pasado 12 de marzo, fue dado de alta este martes y trasladado a una clínica de rehabilitación.
Grillo, de 35 años, abandonó el Hospital Ramos Mejía de Buenos Aires casi tres meses después de ser ingresado en grave estado por el impacto de una granada de gas lacrimógeno en su frente, que le provocó pérdida de masa encefálica.
El fotógrafo, que estuvo casi dos meses en terapia intensiva y fue sometido a múltiples operaciones complejas, fue trasladado en una ambulancia al Hospital de Rehabilitación Manuel Rocca, también en la capital argentina.
Su padre, Fabián Grillo, se mostró «emocionado y alegre» por el traslado de su hijo y anticipó en declaraciones a la prensa a la salida del hospital que ahora comenzará una etapa de lenta rehabilitación.
Además, explicó que Pablo ha comenzado a caminar y ha ido recuperando la memoria, pese a que no tenía registro de lo sucedido el 12 de marzo.
Aquel episodio tuvo lugar en un contexto de fuerte represión por parte de las fuerzas de seguridad contra los manifestantes que reclamaban mejores condiciones para los jubilados del país suramericano.
En el operativo policial, a cargo de la ministra de Seguridad Nacional, Patricia Bullrich, las fuerzas utilizaron escuadrones de infantería equipados con gas pimienta, escopetas con balas de goma y lanzagranadas, que dejaron un saldo final de 46 heridos y 124 detenidos.
La ONG Mapa de la Policía, mediante el análisis del material audiovisual, concluyó que un efectivo de la Gendarmería Nacional de apellido Guerrero habría sido el responsable de disparar la granada de forma horizontal, que terminó hiriendo a Grillo.
La familia del fotógrafo inició a mediados de marzo acciones legales contra los responsables del operativo, incluida la ministra Bullrich, una causa que sigue su curso en la Justicia.
«La causa está marchando, estamos esperando que llamen a esta persona, a Guerrero, a indagatoria», señaló el padre del fotógrafo, que cuestionó las «agresiones constantes» por parte del Gobierno y su «falta de empatía».
La salida de Grillo del hospital se produce además en la antesala de una importante movilización prevista para este miércoles.
A diferencia de las protestas que grupos de jubilados realizan cada semana frente al Congreso, la manifestación de esta semana aglutinará a diversos colectivos, incluyendo a médicos, científicos, migrantes y grupos feministas, que se movilizarán «contra el ajuste y la crueldad» del Gobierno de Javier Milei.
