Málaga, 30 jul (EFE).- El gestor y agente de seguros de Vélez-Málaga (Málaga) detenido este martes por la Policía Nacional en Logroño por una estafa millonaria en numerosos puntos de España utilizaba una arquitectura delictiva basada en el engaño piramidal.
De las pesquisas policiales se desprende que el investigado, que recibía grandes cantidades de dinero en efectivo, utilizaba los ingresos para abonar dividendos y para la captación de nuevos clientes, según han informado a EFE fuentes policiales.
La investigación continúa abierta para intentar determinar el alcance patrimonial de la «estafa en masa», que alcanza ya los más de 5.000.000 de euros y que hasta el momento se ha saldado con la detención del principal investigado y su pareja.
El detenido, bajo la apariencia de ser un excelente inversor, recibiría grandes cantidades de dinero en efectivo por parte de particulares y empresarios con el fin de invertirlas en fructíferos negocios.
Él y su pareja han sido localizados y detenidos en Logroño, ciudad a la que habían huido tras las primeras denuncias de los afectados.
Por el momento, las víctimas que han denunciado los hechos ascienden a 80, si bien los investigadores tienen conocimiento de que este número podría aumentar considerablemente debido a la magnitud de la estafa.
La Policía continúa recabando información de posibles víctimas
Para facilitar y centrar toda la información que puedan aportar los afectados la Policía Nacional facilita el siguiente correo velez.judicial@policia.es al que podrán dirigirse y desde el que se darán las pautas a seguir por parte de los agentes.
Hasta la fecha los investigadores han tomado declaración a más de 80 personas, que han relatado las inversiones realizadas sin que ninguno de ellos haya obtenido los beneficios prometidos ni recuperado el capital entregado.
Estafas a medida según el perfil de las víctimas
Respecto al ‘modus operandi’, destaca la captación, gracias a la gestoría de un familiar y su reputación en la localidad veleña, de clientes para la inversión en aseguradoras mediante la recepción de dinero efectivo, a cuyos ‘inversores’ expedía un recibí sin darles cuenta de cómo y dónde manejaba el dinero.
Cantidades que controlaba directamente el investigado y de las que no daba cuenta exacta de qué estaba haciendo con ellas.
Este era un método habitual, pero no ha sido el único; además habría recurrido a inversiones en proyectos inmobiliarios, para lo que solicitaba aportaciones desde los 30.000 euros en adelante para participar en una inversiones inmobiliarias en Vélez Málaga o adquirir apartamentos en otras localidades.
Una tercera modalidad consistía en la adquisición directa de inmuebles que el detenido decía haber comprado o estar a punto de comprar por un precio muy por debajo del mercado.
No obstante, los afectados jamás adquirieron derecho alguno ni el dinero fue destinado a dicho propósito. Estos métodos los habría llevado a cabo en los últimos quince años y habrían colapsado recientemente con las primeras denuncias de los afectados que ya no recibían beneficio alguno.
Tras las indagaciones de los investigadores se ha constatado cómo los detenidos aplicaban cada una de estas metodologías delictivas a la medida del perfil de sus víctimas captada; ofreciendo a un perfil de pequeño ahorrador un producto financiero o fondo de inversión de una aseguradora y a un perfil más empresarial inversiones inmobiliarias que no eran de su propiedad y a las cuales accedía gracias a su dilatada red de contactos.
Los agentes destacan no solo la interconexión de su ‘modus operandi’ sino la enorme variedad de perfiles afectados pertenecientes a diversos ámbitos profesionales.
Todo ello fruto de su fama como excelente inversor, su alto nivel de vida y cierta «generosidad» mediante la cual captaba a nuevas víctimas con invitaciones a grandes eventos, con transporte incluido y gastos pagados lo cual le iba forjando una fama que se fue extendiendo incluso fuera de la localidad.
Todo ello provocaba un efecto llamada para la captación de nuevos clientes y les permitía acceder a círculos sociales y con ello seguir ampliando su red de contactos.
Registros
Se han realizado tres registros en la localidad malagueña de Vélez Málaga y uno en Logroño, donde el detenido se ocultó junto a su familia.
En los registros los agentes se han incautado de numerosos documentos y dispositivos electrónicos.