Madrid, 15 jul (EFE).- El Consejo de Ministros tiene previsto aprobar este martes en segunda vuelta la reforma de las leyes de dependencia y discapacidad para iniciar la tramitación parlamentaria, que amplía derechos y prestaciones y quiere agilizar los procedimientos.
La norma, impulsada por el Ministerio de Derechos Sociales de Pablo Bustinduy, suprime el régimen de incompatibilidades en las prestaciones de dependencia, expande la ayuda a domicilio a otras tareas como la compra o realizar trámites, y reconoce la teleasistencia como un derecho subjetivo.
Según recoge el anteproyecto, que ya ha recabado los informes preceptivos, se reconoce de manera automática a cualquier dependiente con una discapacidad del 33 % para ahorrar cargas administrativas y las comunidades tendrán que realizar obras de accesibilidad (ascensores, rampa…) si lo solicita un vecino, con el apoyo de ayudas y subvenciones.
También cambia la ley general de derechos de las personas con discapacidad de 2013 para eliminar la discriminación en la contratación de seguros de salud y vida, incluye la accesibilidad universal como un derecho que se podrá reclamar ante la justicia y crea un fondo estatal para promoverla en entornos públicos.
Dentro de esta norma, según el anteproyecto, se regula como infracción grave, con multas de entre 600.000 euros y un millón, espectáculos similares al ‘bombero torero’ y en general, la exposición pública de una persona atendiendo a su discapacidad.
Los cambios en la ley de dependencia de 2006 van dirigidos a agilizar trámites, suprimir el régimen de incompatibilidades entre prestaciones y ampliar la prestación para cuidados a personas allegadas atendiendo a las nuevas situaciones de convivencia, como vecinos o amigos.