Kinsasa, 16 mar (EFE).- El poderoso grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23), que combate contra el Ejército de la República Democrática del Congo (RDC) en el este del país, acusó este domingo al Gobierno congoleño de querer “torpedear” el diálogo que está previsto que empiece entre ambas partes el próximo martes en Luanda, la capital de Angola.
El M23 “condena con la mayor firmeza las continuas masacres de la población civil y los ataques dirigidos contra nuestras posiciones en vísperas del diálogo directo”, dijo a través de la red social X el portavoz de la milicia, Lawrence Kanyuka.
Kanyuka lanzó este mensaje después de que el presidente de Angola, João Lourenço, que actúa como mediador en el conflicto, pidiera el sábado el inicio de un alto el fuego entre las partes a partir de este domingo para facilitar las conversaciones.
“Desde hace cuatro días, las fuerzas de la coalición del régimen de Kinsasa (capital de la RDC) bombardean indiscriminadamente zonas densamente pobladas y matan a nuestros compatriotas”, afirmó Kanyuka, al acusar al Ejército congoleño de usar aviones de combate y drones contra la población.
“Esta escalada mortal pretende distraernos y demuestra la voluntad del régimen de Kinsasa de torpedear el tan esperado diálogo”, añadió, al dar “acuse de recibo” de la carta de invitación del Gobierno angoleño para participar en las conversaciones.
El presidente Lourenço anunció el pasado miércoles el inicio de negociaciones directas de paz entre el Gobierno de la RDC y el M23 el próximo 18 de marzo en Luanda.
Horas después del anuncio, la noche del miércoles al jueves, el M23 tomó control de la isla Idjwi, en el lago Kivu. Así, el grupo controla ya siete de los ocho territorios que componen la provincia oriental de Kivu del Sur.
Tina Salama, la portavoz del presidente de la RDC, Félix Tshisekedi, que hasta la fecha se ha opuesto a participar en conversaciones que incluyeran a los rebeldes, pese a la presión internacional a favor, se limitó a señalar en X: “Tomamos nota y esperamos la puesta en marcha de este proceso por parte de la mediación angoleña”.
El anuncio de las conversaciones se emitió después de que Lourenço se reuniera con Tshisekedi en Luanda.
El M23, que cuenta con apoyo de Ruanda -según la ONU y países como EE.UU., Alemania y Francia-, controla las capitales de las provincias de Kivu del Norte y Kivu del Sur, fronterizas con Ruanda y ricas en minerales como el oro o el coltán, fundamentales para la industria tecnológica y en la fabricación de teléfonos móviles.
El número de muertos por el conflicto en la capital de Kivu del Norte, Goma y alrededores superó los 8.500 desde el pasado enero, según detalló a finales de febrero el ministro congoleño de Salud Pública, Samuel Roger Kamba.
En esa provincia se reanudó la actividad armada del M23 -grupo formado principalmente por tutsis que sufrieron el genocidio ruandés de 1994- en noviembre de 2021 con ataques relámpago contra el Ejército congoleño.
Desde entonces, ha avanzado por varios frentes, lo que ha elevado los temores a una posible guerra regional.
Desde 1998, el este de la RDC está sumido en un conflicto alimentado por milicias rebeldes y el Ejército, a pesar de la presencia de la misión de paz de la ONU (Monusco). EFE
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