Santa Cruz De Tenerife, 29 jul (EFE).- Investigadores del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) lideran los primeros resultados científicos del espectrógrafo NIRPS, en Chile, que avalan su capacidad para detectar por primera vez en el infrarrojo planetas similares a la Tierra con una precisión inferior al metro por segundo.
Construido con participación del IAC e instalado en el telescopio de 3,6 metros del Observatorio de La Silla de la ESO, el espectrógrafo ha logrado sus primeros resultados científicos con cuatro artículos que se publican este martes en la revista Astronomy & Astrophysics, y uno más aceptado para publicación.
Uno de los trabajos, liderado por el investigador del IAC Alejandro Suárez, confirma la presencia de un planeta de un tercio de la masa de la Tierra en órbita a Proxima Centauri, la estrella más cercana al Sol.
Tras dos años de observaciones de tiempo garantizado, el espectrógrafo infrarrojo NIRPS (Near InfraRed Planet Searcher) presenta sus primeros resultados científicos, señala el IAC, que indica que el instrumento, diseñado para detectar planetas de tipo terrestre en torno a estrellas frías y pequeñas, ha demostrado ser capaz de alcanzar, por primera vez con un instrumento infrarrojo, una precisión mejor que un metro por segundo en la medida de velocidades radiales, una condición imprescindible para detectar el leve movimiento que inducen estos planetas sobre sus estrellas.
“NIRPS ha sido concebido como una herramienta de alta precisión para estudiar planetas en órbita a estrellas enanas rojas. Estos primeros resultados muestran que el instrumento puede llegar incluso más allá de lo que esperábamos”, señala François Bouchy, investigador del Observatoire de Genève y coinvestigador principal del consorcio NIRPS junto a Rene Doyon, de la Universidad de Montreal.
El equipo científico ha elegido como uno de sus primeros objetivos Proxima Centauri, la estrella más cercana al Sol, y que se trata de una enana roja situada a 4,2 años luz de distancia.
Proxima cuenta con un planeta confirmado, Proxima b, en la zona habitable, y dos candidatos que estaban aún por confirmar.
Usando datos de NIRPS, el equipo liderado por Alejandro Suárez ha podido caracterizar la señal de Proxima b con rotunda claridad, demostrando la capacidad del instrumento para detectar este tipo de planetas.
Combinando estos datos con otras series temporales de instrumentos como HARPS, ESPRESSO, y UVES, han podido confirmar con gran solidez la existencia del pequeño planeta Proxima d, de apenas un tercio de la masa de la Tierra.
“Este trabajo demuestra el potencial de NIRPS para afrontar los grandes retos que plantea la detección de planetas terrestres en estrellas frías, las más comunes del vecindario solar”, explica Suárez.
“Proxima es el sistema más cercano al Sol y a la vez uno de los más interesantes que conocemos. Haber podido confirmar y caracterizar sus planetas con esta precisión marca un paso fundamental hacia la detección de mundos realmente parecidos a la Tierra”, añade.
La participación española en el desarrollo de NIRPS ha estado coordinada desde el IAC, que ha contribuido al diseño, desarrollo y puesta en marcha del haz de fibras del instrumento.
“Desde el IAC hemos participado en el desarrollo tecnológico de NIRPS, pero también formamos parte activa del esfuerzo científico internacional que lo explota”, señala Jonay González, investigador del IAC y responsable de la participación española en el proyecto.
El astrónomo subraya que estos primeros resultados validan no solo la calidad técnica del instrumento, sino también su enorme potencial para la astrofísica de exoplanetas.
Junto a los resultados de velocidad radial, NIRPS ha comenzado también a mostrar su capacidad para estudiar atmósferas de exoplanetas y así un estudio liderado por Romain Allart, de la Universidad de Montreal, lo ha utilizado para detectar un escape atmosférico retardado en el planeta WASP-69b, un Saturno caliente con órbita desalineada. EFE
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