El jurado del juicio por tráfico sexual contra Diddy se retira a deliberar

Fotografía de archivo de Sean Combs. EFE/Guillaume Horcajuelo

Nueva York, 30 jun (EFE).- Los doce miembros del jurado que decidirán el futuro de Sean Combs, conocido como Diddy, en el juicio por tráfico sexual que enfrenta en Nueva York se retiraron este lunes a deliberar, llegando así a la etapa final del proceso judicial.

«Tienen que tomar importantes decisiones, revisar las pruebas y evitar llegar a conclusiones rápidas basadas en sus opiniones personales (…). Estoy seguro de que, si siguen su sentido común, llegarán a un veredicto justo», indicó el juez del caso, Arun Subramanian, mientras Diddy, impasible, miraba fijamente a los jurados.

El rapero, que hoy lucía de nuevo un jersey blanco con pantalones grises, contó una vez más con el apoyo en el tribunal de seis de sus hijos y su madre, que desde la tercera fila de la sala se intercambiaban notas entre ellos.

Diddy, que de ser declarado culpable de todos los cargos podría pasar el resto de su vida en prisión, también pasaba notas a sus abogados, a los que además abrazó al entrar en la corte.

Durante unas dos horas, Subramanian se dedicó a dar instrucciones a los jurados sobre cómo deliberar, y desglosó uno por uno los cargos que afronta Combs: uno por asociación ilícita, dos por tráfico sexual y otros dos de transporte para ejercer el proxenetismo.

Así, explicó en que consiste cada uno de ellos: por ejemplo, en el caso de asociación ilícita, las fiscales deben haber demostrado que hubo mutuo acuerdo «entre dos o más personas» para cometer diversos delitos, entre ellos secuestro, tráfico sexual, distribución de drogas o secuestro.

Mientras que en lo que respecta a las acusaciones de tráfico sexual, se debe haber convencido a los jurados de que Combs obligó mediante la fuerza, el fraude o la coerción a sus ahora exparejas Cassie Ventura y una mujer anónima que ha testificado bajo el seudónimo genérico de Jane, a participar en actos de prostitución.

Por último, la Fiscalía debe haber demostrado que Combs también trasladó o facilitó el traslado de personas entre estados de EE.UU. y países para participar en actividades sexuales pagadas con dinero.

Subramanian les recordó que deben llegar a un veredicto unánime y que, en caso de hallar culpable a Combs, deben hacerlo «más allá de cualquier duda razonable», teniendo en cuenta las pruebas mostradas en el juicio y no los alegatos de apertura y de cierre de defensa y Fiscalía.

«Si tienen alguna duda, es su deber absolver (a Combs)», insistió el juez.

Además, les instó a valorar por ellos mismos la credibilidad de los más de treinta testigos que han sido llamados a declarar por las fiscales: «No hay una fórmula mágica para hacer esto, tienen que escudriñar a los testigos y las declaraciones que dieron, teniendo en cuenta si fueron incoherentes en su testimonio o si creen que alguien mintió al declarar», subrayó.

El jurado tendrá que elegir ahora a un portavoz que, mediante notas, se comunicará con el juez si hay alguna duda entre los miembros del panel y, finalmente, cuando se alcance un veredicto consensuado.