Madrid, 24 abr (EFE).- Las inversiones contempladas en el Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa, anunciado por el Gobierno, podrían servir de estímulo a la reindustrialización de España gracias a la aparición de nuevos ‘hubs’ tecnológicos que se unirían a los corredores ya existentes.

El sector celebra el impulso a este ecosistema de innovación que ve como una oportunidad para un país que acoge alrededor de 1.500 centros de trabajo que 544 compañías suministradoras de defensa tienen repartidos en todas las provincias españolas -a excepción de Zamora- y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.
Son los cálculos del anuario ‘Spain Defence & Security Industry’ 2025, publicado por Infodefensa con datos del Registro de Empresas de la Dirección General de Armamento y Material del Ministerio de Defensa, que se ha convertido en una de las pocas panorámicas sobre una actividad reacia a pormenorizar las magnitudes de sus negocios.
Como recoge la Estrategia Industrial de Defensa 2023, la industria de defensa en España se agrupa principalmente en tres grandes corredores industriales: norte, centro-mediterráneo y sur.
Estos ejercen una capilaridad en todo el territorio nacional que permite extender los beneficios derivados de las inversiones de defensa, permitiendo que empresas de toda España formen parte de la cadena de suministro del sector.
Ya en ese documento se hablaba de ellos como una “apuesta estratégica” a ampliar con un cuarto corredor, denominado de La Plata, que se extiende de norte a sur desde Asturias-León-Zamora hasta Sevilla.
Ahora, los detalles de la inversión adicional de 10.471 millones de euros para seguridad y defensa, conocidos en la víspera, desvelan que el 89 % de los recursos financieros del Plan Industrial y Tecnológico se invertirá en España.
El Ejecutivo aspira a que contribuyan a generar empresas y empleo en “todas las comunidades autónomas” a través de los corredores ya consolidados, como el aeroespacial en Madrid y Sevilla; el de helicópteros en Albacete; el de vehículos terrestres en Galicia y Asturias, o el naval en Galicia, Cartagena y Andalucía.
También en otros en fase de consolidación y nuevos ‘hubs’ industriales-tecnológicos que se crearán en otras regiones.
Grandes corredores
En los tres primeros corredores, que se extienden por 38 provincias, habría 1.287 centros de trabajo, el 87 % del total, suponiendo el núcleo de la industria de defensa del país, conforme al ‘Spain Defence & Security Industry’, con listados de 2022 y 2023.
A tenor de ese mapa, el corredor centro-mediterráneo sería el de mayor volumen, con 713 centros y 18.404 empleados. Madrid, con 428 centros, Murcia (82) y Valencia (56), serían los polos más numerosos.
La Estrategia de 2023 habla de él como “el punto de apoyo desde donde se propaga el efecto capilar por el resto del territorio”.
Empieza en el polo naval de Cartagena, especializado en el diseño y sostenimiento de submarinos como el S-81 ‘Isaac Peral’ de Navantia, diseñado para reforzar la capacidad de defensa submarina de España.
Mientras, el centro peninsular aglutina capacidades productivas y de mantenimiento de aviones de combate como el Eurofighter y de transporte como el MRTT, avión de reabastecimiento en vuelo cuyo contratista principal es Airbus.
Después estaría el corredor norte, con 2.827 empleados y 337 centros repartidos entre A Coruña (72); Vizcaya (56), y Zaragoza y Cantabria (ambas con 42), principalmente.
Sus actividades van desde el polo naval de la ría de Ferrol, con programas como las fragatas F-100 Y F-110, y la producción de vehículos terrestres a las capacidades de munición y componentes armamentísticos (Rheinmetall Expal Munitions, en Oviedo) y de estructuras aeronáuticas (Aernnova Aerospace, en Vitoria-Gasteiz).
El corredor sur, por su parte, reuniría a 6.897 empleados y 228 centros, ubicados, en su mayoría, en Sevilla (94), donde es remarcable su polo aeronáutico, con la participación en grandes programas nacionales como el A400M de Airbus, que ejerce de efecto tractor para empresas auxiliares y la cadena de suministro.
Igualmente importante resulta la bahía de Cádiz, especializada en el diseño y la fabricación de buques patrulleros.
La Plata y otros territorios
Desde el Ministerio de Defensa se busca, asimismo, potenciar un cuarto corredor, el de La Plata, con 153 centros y unos 5.212 empleados, en el que es relevante el sector terrestre.
En su extremo norte sobresale la fábrica de armas de Trubia, próxima a Oviedo, en manos de GDELS-Santa Bárbara Sistemas, mientras que en el sur lo hace la factoría de Alcalá de Guadaira (Sevilla). En ambos casos, la actividad está en buena parte vinculada al nuevo blindado VCR 8×8 Dragón del Ejército de Tierra.
Corredores al margen, las ubicaciones restantes se sitúan fundamentalmente en Barcelona, con 91 centros.
Contribución económica
De acuerdo con el informe elaborado por PwC para la Asociación de Empresas Tecnológicas de Defensa, Seguridad, Aeronáutica y Espacio (Tedae), la industria de defensa y seguridad alcanzó en 2023 un impacto total en PIB de 10.609 millones de euros.
Siete comunidades obtuvieron el 84 % de la contribución total. Estas estuvieron lideradas por la Comunidad de Madrid, con 4.222 millones de euros de contribución total al PIB regional (el 28,03 % del PIB industrial de la región).
Le siguieron Andalucía, con 1.675 millones de euros de contribución total al PIB regional; Cataluña (884 millones); País Vasco (756 millones); Galicia (598 millones); Región de Murcia (462 millones), y el Principado de Asturias (308 millones).
De cumplirse las estimaciones de La Moncloa, el nuevo plan contribuirá a incrementar el PIB entre 0,4 y 0,7 puntos, aumentar la I+D+i en un 18 % y crear casi 100.000 empleos, 36.000 directos y unos 60.000 indirectos.