Barcelona, 1 oct (EFE).- Alrededor de un millar de personas han llenado este miércoles la plaza de Sant Jaume de Barcelona para denunciar que el edadismo que impera en todos los ámbitos de la sociedad «excluye, invisibiliza y desprecia a las personas mayores» e invitar a combatirlo con el «orgullo de la edad».

En el Día Internacional de las Personas Mayores y bajo el lema ‘Por una sociedad libre de edadismo’, la movilización, impulsada por más de una treintena de entidades civiles, sindicatos y partidos políticos, ha sentado frente a un escenario, literalmente, a unas 600 personas mayores.

A ellas se han sumado otras en silla de ruedas y centenares de pie para escuchar los parlamentos de representantes del grupo promotor de la movilización y el manifiesto de este año, que ha leído la actriz Vicky Peña.
Con el título ‘Por una sociedad libre de edadismo’, el manifiesto, que ya han firmado un millar de personas y entidades, entre ellas el Ayuntamiento de Barcelona, urge a que las políticas públicas aseguren la igualdad y la participación, garanticen los derechos y oportunidades y fomenten el envejecimiento activo para combatir la exclusión social por temas de edad.
«Hoy las personas mayores alzamos la voz para exigir una sociedad que nos respete, nos valore y nos incluya sin que nuestra edad se convierta en motivo de discriminación o exclusión», ha leído Vicky Peña.
El manifiesto también denuncia que las mujeres mayores son las más afectadas por el edadismo, «ya que sufren una doble discriminación: por razón de edad y de género, lo que agrava su exclusión social».
Reclama «promover políticas y leyes que nos protejan contra la discriminación por edad, y fomentar la inclusión y el respeto mutuo entre las diferentes generaciones», y expresa el rechazo a «cualquier intento de generar confrontación entre jóvenes y mayores».
«Queremos envejecer con dignidad, no con miedo. Somos una parte activa de la sociedad, somos artífices de nuestra vida y un grupo social con identidad y derechos compartidos. Porque el valor de una persona no disminuye con la edad, y porque una sociedad justa y madura es aquella que no deja a nadie atrás», apunta el manifiesto, que concluye advirtiendo de que «nuestra sociedad será realmente justa solo cuando sea inclusiva para todos y esté libre de discriminación por edad».
Entre las decenas de personalidades de la sociedad civil y la política que han asistido al acto estaban el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni; la presidenta de la Diputación de Barcelona, Lluïsa Moret; o la consellera de Derechos Sociales e Inclusión, Mònica Martínez Bravo.
A la concentración también han acudido decenas de personas mayores con banderas y enseñas independentistas, además de con pancartas en recuerdo del referendo y los incidentes del 1 de octubre de 2017, que en algunos momentos del acto, y sobretodo al final, han vitoreado el lema ‘1 de octubre, ni olvido ni perdón’.
También se ha podido ver alguna bandera de Palestina y desde el escenario se ha expresado la solidaridad con las personas mayores que sufren los conflictos de Gaza y Ucrania.
Según la organización, han participado en la concentración 1.300 personas, mientras que la Guardia Urbana ha rebajado la cifra a 850.