‘El Otro Mundo’, el primer cómic que rescata las Misiones Pedagógicas de la República

'El Otro Mundo' es la primera novela gráfica que rescata las Misiones Pedagógicas de la Segunda República, un proyecto que llevó bibliotecas, discos y gramófonos a 5.000 pueblos de España, pero que los autores del cómic, Enrique Bonet y Joaquín López, sitúan en la Alpujarra granadina en el verano de 1933. EFE/José Albornoz/Astiberri

Madrid, 28 ago (EFE).- ‘El Otro Mundo’ es la primera novela gráfica que rescata las Misiones Pedagógicas de la Segunda República, un proyecto que llevó bibliotecas, discos y gramófonos a 5.000 pueblos de España, pero que los autores del cómic, Enrique Bonet y Joaquín López, sitúan en la Alpujarra granadina en el verano de 1933.

En una entrevista con EFE, Bonet, dibujante, pero en esta ocasión guionista de la novela, editaba por Astiberri y a la venta desde este jueves, explica que la idea de sacar a la luz las Misiones Pedagógicas surgió de la «fascinación» por una foto en la que se veía a «unos señoritos montados en burro, cargados con bártulos y pisando barro» y que correspondía a un documental sobre la actividad misionera de estudiantes, maestros e intelectuales entre 1932 y 1936.

Bonet comenta que la actividad de estas misiones fue «intensa, pero forzosamente breve», en el sentido de que pasaban solo dos o tres días en cada pueblo.

Pese a este tránsito fugaz, las Misiones Pedagógicas dejaron un gran poso entre los habitantes de estos pueblos recónditos, a quienes mostraron la música, el arte, el teatro, la poesía, la pintura y los últimos avances científicos y tecnológicos.

Un museo ambulante con los mejores cuadros del Prado

'El Otro Mundo' es la primera novela gráfica que rescata las Misiones Pedagógicas de la Segunda República, un proyecto que llevó bibliotecas, discos y gramófonos a 5.000 pueblos de España, pero que los autores del cómic, Enrique Bonet y Joaquín López, sitúan en la Alpujarra granadina en el verano de 1933. EFE/José Albornoz/Astiberri

«Gracias a las Misiones Pedagógicas, muchos aldeanos descubrieron el cine, los dibujos animados o las películas de Charlot. También pudieron admirar los mejores cuadros del Museo del Prado que viajaban en un Museo ambulante de copias fidedignas, a escala real, realizadas por jóvenes pintores del momento», dice Bonet.

El cómic se desarrolla en Neveros, un pueblo que no existe, como tampoco es real la maestra de pelo rojo (María) o la niña Tizná, víctima de violencia sexual.

Pero no todo es fruto de la imaginación, subraya Bonet, quien recuerda que algunos de los personajes «vivieron en carne y hueso» como el cineasta José Val del Omar o el padre Hitos, que buscaba mártires y reliquias por la Alpujarra.

Y lo que también es cierto, «aunque a algunos les pueda parecer mentira, es que existió un breve periodo de la historia de España que no estuvo tutelado ni por reyes ni por dictadores y en los que se quiso llevar la educación y la cultura a todos los rincones del país».

Así resume el guionista el sentido de la novela, y lo deja escrito, a modo de colofón, en unas páginas al final, en formato artículo de prensa, pero con fotos de la época atribuidas a José Val del Omar y publicadas en la Memoria de actividades del Patronato de Misiones Pedagógicas.

Tres mujeres en tres fases de la vida, protagonistas

'El Otro Mundo' es la primera novela gráfica que rescata las Misiones Pedagógicas de la Segunda República, un proyecto que llevó bibliotecas, discos y gramófonos a 5.000 pueblos de España, pero que los autores del cómic, Enrique Bonet y Joaquín López, sitúan en la Alpujarra granadina en el verano de 1933. EFE/José Albornoz/Astiberri

Joaquín López es el ilustrador de la novela, en la que ambos emplearon casi cinco años de trabajo.

López explica a EFE que, en un principio, el cómic iba ser en blanco y negro, pero al final se llegó a una paleta de color.

Y esa paleta destaca a los tres principales personajes femeninos: el fantasma de una mujer que quiere conocer la capilla de las ánimas, una maestra republicana y una niña abusada sexualmente que se conectan por el color rojo con el que las pinta el ilustrador.

El título de la novela ‘El Otro Mundo’ tiene varias lecturas: «el mundo republicano que pudo ser y no fue, el contraste entre el entorno rural y el urbano o el acceso de la mujer fantasma al mundo de la muerte», comenta.

El ilustrador, con una larga trayectoria en el mundo del cómic y el diseño gráfico desde los años 80, valora el trabajo a dos manos con Bonet que ha permitido la creación de una novela «con magia», que él solo, dice, hubiera sido incapaz de hacer.