Madrid, 11 ago (EFE).- El paquete fiscal aprobado a finales del pasado año aportó 723 millones de euros adicionales de recaudación en el primer semestre, procedentes del nuevo impuesto a la banca y el aumento de la tributación del tabaco, de acuerdo a los primeros datos y a falta de que se contabilice el grueso de las medidas.
El último informe de recaudación de la Agencia Tributaria recoge algunos datos sobre el impacto inicial del paquete fiscal, una extensa norma con la que el Gobierno aspiraba a elevar los ingresos públicos en unos 8.000 millones de euros.
Sin embargo, muchas de las medidas todavía no han empezado a reflejarse en la recaudación, ya sea porque no se han liquidado aún o porque afectan a conceptos que no aparecen desglosados en los informes mensuales.
Primeros ingresos de la banca y el tabaco
Una de las medidas estrella del paquete fiscal fue la aprobación de un nuevo impuesto sobre los márgenes bancarios para sustituir al gravamen temporal, que en su primer pago fraccionado, efectuado en junio, ha ingresado 566 millones de euros.
Además, se subieron los tipos del impuesto sobre las labores del tabaco, lo que ha permitido recaudar 152 millones adicionales en el primer semestre (elevando el total a 3.280 millones) y se creó un nuevo impuesto especial que grava el líquido de los cigarrillos electrónicos, con el que se han ingresado 5 millones.
El pago del impuesto complementario sigue pendiente
El origen del paquete fiscal fue la creación de un impuesto complementario para las multinacionales, un norma que transpone una directiva europea y que pretende garantizar que estas compañías paguen un tipo efectivo de, al menos, el 15 %.
Este nuevo impuesto ya cuenta con un reglamento en vigor y sus modelos de pago, todavía pendientes de aprobación, prevén que la declaración informativa del ejercicio 2024 se presente en junio de 2026 y el impuesto se liquide en julio de ese año, por lo que no tendrá ningún impacto recaudatorio en este ejercicio.
En cambio, hay otras medidas que sí se están aplicando, aunque no hay datos desglosados de su impacto, como la bajada del IVA para los productos de leche fermentada como el yogur, la subida del IRPF para las rentas del capital superiores a 300.000 euros o la bajada del impuesto de sociedades para microempresas.
Cambios en el impuesto de sociedades
Más complejo resultará cuantificar el impacto de las modificaciones introducidas en el impuesto de sociedades para neutralizar el impacto de la anulación por parte del Tribunal Constitucional de las reformas del PP sobre este impuesto.
Las medidas implementadas afectan a cuestiones como la limitación en la compensación de las bases imponibles y deducciones por doble imposición, pero no son idénticas a las que fueron anuladas por el Constitucional, que según la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, hubieran supuesto una pérdida de recaudación de 5.000 millones.
Y aunque no constituye una pérdida de recaudación como tal, hay que tener en cuenta que el paquete fiscal derogó el gravamen temporal sobre las energéticas, que había ingresado 612 millones en el primer semestre de 2024.
Como el gravamen bancario, esta figura tenía una vigencia limitada que no contemplaba recaudación para este año, aunque se barajó la posibilidad de extenderla o de convertirla en un impuesto permanente, algo finalmente descartado por falta de apoyos.