Aníbal de la Beldad
Tablas de Daimiel (Ciudad Real), 15 abr (EFE).- El Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel, en la provincia de Ciudad Real, se ha convertido en un auténtico edén para el turismo esta Semana Santa y estos días recibe a miles de visitantes atraídos por la mejoría que ha experimentado el humedal manchego, que de estar prácticamente seco en diciembre tiene inundadas algo más de 1.000 hectáreas de su superficie, que dan cobijo a miles de aves acuáticas.
El número de visitas a Las Tablas de Daimiel ha comenzado a dispararse en las últimas semanas, hasta el punto de que en una sola jornada se han contabilizado más de 6.000 personas, según han explicado a EFE fuentes del parque nacional.
El nivel de visitas de este año podría acercarse a final de año al registro histórico de visitas de 2010, cuando el parque registró 398.740 personas al inundarse por completo de agua como consecuencia de un intenso periodo húmedo, lo que motivó que muchos decidieran entonces disfrutar del humedal.
El pasado año el humedal manchego registró 153.541 turistas frente a los 108.460 del año anterior, lo que significó un 41,5% más de visitantes, según los datos del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco).
En los últimos tres años, Las Tablas de Daimiel han registrado más de 100.000 turistas cada año, si bien, en 2024 se superaron los 150.000 a pesar de la mala situación que presentaba el parque a finales de diciembre con apenas 60 hectáreas inundadas de las 1.734 hectáreas que conforman la superficie encharcable, lo que suponía el 3% de la superficie total.
La puesta en marcha de los pozos de emergencia el pasado mes de diciembre para evitar los incendios de las turbas y garantizar la invernada de las aves acuáticas, unido a los aportes naturales que Las Tablas está recibiendo del río Gigüela, dejan una buena parte del humedal inundado y un momento único para visitarlo, ha explicado a EFE Alejandro del Moral, gerente ‘Caminos del Guadiana’, empresa de ecoturismo que junto a ‘Destinos Manchegos’ y ‘Naturaleza Indómita’ son las tres autorizadas a realizar visitas guiadas.
Del Moral ha comentado que la aparición en la prensa del buen estado en el que se encuentra el parque “han disparado” las llamadas de personas interesadas en reservar visita.
“Gente que no ha venido nunca, y gente que ha venido y ha visto Las Tablas de Daimiel más secas quieren visitarlas; y nosotros estamos encantados de acompañarles para que disfruten de un humedal que cuando tiene agua ofrece lo mejor de si, pero que no hay que olvidar que sigue estando muy amenazado por la sobrexplotación del acuífero que lo sustenta y la sequía crónica que sufre desde los años 80”, ha señalado.
Tener más de un 50% de la superficie del parque inundada, ha dicho, es “una verdadera locura” y supone tener más alternativas para visitar el parque y deslocalizar los recorridos más allá de las zonas de uso público.
“Ahora podemos no sólo visitar el entorno a la Isla del Pan, sino que también podemos desplazarnos a la zona de la Torre de Prado Ancho que se encuentra inundada por el río Gigüela y que da otra visión diferente del parque”, ha concretado.
Del Moral ha indicado que los próximos meses serán un buen momento para visitar el parque, porque coincidirán con la cría de aves acuáticas, que este año será muy buena, lo que permitirá disfrutar mejor de la observación de las aves.
También ha dicho que ahora es el inicio de la época de cría, “una oportunidad única de ver aves en cortejo, disfrutar de sus espectaculares plumajes e, incluso, observarlas ya con sus pollitos, como es el caso de los gansos en estos momentos”, ha dicho.