El partido de Ishiba sufre otro revés con el mínimo histórico de escaños a la Asamblea de Tokio

El primer ministro de Japón, Shigeru Ishiba, durante una rueda de prensa este domingo, 22 de junio, en Tokio (Japón). EFE/Jiji Press

Tokio, 23 jun (EFE).- El Partido Liberal Democrático (PLD) del primer ministro Shigeru Ishiba sufrió un nuevo revés para su Gobierno en minoría al obtener el domingo un mínimo histórico de escaños en las elecciones a la Asamblea de Tokio, consideradas un preludio de los comicios a la Cámara Alta que tendrán lugar en julio.

El partido Tomin First (Tokiotas primero) fundado por la actual gobernadora de la capital japonesa, Yuriko Koike, fue la fuerza política más votada en dichos comicios regionales, los más importantes de este tipo en el país asiático, con 32 escaños de los 127 que componen la Asamblea, en una muestra de la popularidad de sus políticas de bienestar social y crianza de los hijos.

Por su parte, el PLD obtuvo 22 escaños -entre ellos tres de candidatos anteriormente afiliados al partido pero sin respaldo oficial debido a un escándalo de financiación política-, la cifra más baja jamás registrada y por debajo de los 23 que obtuvo en 2017.

El Partido Constitucional Democrático de Japón (PCD), la principal fuerza de la oposición a nivel nacional, y el partido Komeito, socio de coalición del PLD, obtuvieron 17 y 19 escaños, respectivamente, según el recuento oficial facilitado este lunes.

El Partido Democrático para el Pueblo, que ha cobrado impulso en el Parlamento nacional, ganó 9 escaños, sus primeros en la Asamblea de Tokio, mientras que el nuevo partido populista de derechas Sanseito también entró en el órgano regional, con 3 curules.

Antes de las elecciones locales, el PLD ostentaba 30 escaños en la Asamblea capitalina, seguido por Tomin First, con 26, mientras que Komeito tenía 23 y el PCD 12.

La participación en estos comicios regionales fue del 47,59 %, lo que representó un aumento de 5,2 puntos porcentuales en comparación con las elecciones de 2021.

De acuerdo con los datos de la comisión electoral japonesa, 1,73 millones de personas emitieron el voto por adelantado el sábado, unas 300.000 más que en las elecciones precedentes.

Los resultados de los comicios regionales suponen un nuevo revés para Ishiba, pues tanto su partido como su socio pierden peso en una asamblea fragmentada, en la que ningún partido cuenta con representación suficiente y le da un mayor peso a las alianzas de los partidos.

El foco de estas elecciones estuvo en ver de qué manera los partidos mantenían, incrementaban o veían caer su peso regional, un efecto que se espera que se repita a nivel nacional en las señaladas elecciones parciales a la Cámara Alta de la Dieta (Parlamento).

Los principales temas que marcaron la campaña para los comicios regionales fueron similares a los que centran el debate político nacional: el apoyo a los hogares para mitigar el impacto de la inflación, los escándalos de financiación irregular que salpican al PLD y las medidas para promover la natalidad y la crianza.

El PLD de Ishiba perdió su mayoría parlamentaria en los comicios nacionales de octubre de 2024 y gobierna en minoría junto a su tradicional aliado, Komeito, y con el apoyo puntual del PCD.

Pese a las presiones de la oposición, que incluso barajó presentar una moción de censura contra Ishiba, el mandatario no ha contemplado una disolución anticipada de las dos Cámaras que componen el Parlamento, lo que habría supuesto una apuesta arriesgada al tener en cuenta sus bajos índices de popularidad.