Manila, 11 jul (EFE).- El presidente de Filipinas, Ferdinand Marcos Jr., viajará a Estados Unidos entre el 20 y el 22 de julio, afirmó este viernes el Departamento de Exteriores del país asiático, una visita en la que se espera que el mandatario se reúna con su homólogo, Donald Trump, entre los esfuerzos de Manila por negociar una reducción de los aranceles del 20 % impuestos por Washington.
«Marcos (Jr.) visitará EE. UU. del 20 al 22 de julio», señaló la Cancillería filipina en un comunicado, en el que evitó revelar detalles sobre la agenda del mandatario, mientras Manila «trabaja con el Departamento de Estado estadounidense para finalizar los detalles».
La confirmación de Filipinas llega después de que el secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, afirmara -durante la cumbre de cancilleres de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) en Kuala Lumpur- que Marcos Jr. visitaría Washington «en los próximos días».
«Mantenemos una excelente relación con Japón y Filipinas, y colaboramos estrechamente con ellos en el corredor económico, la seguridad marítima y la integridad territorial. Seguimos consolidando esta asociación, y esperamos recibir al presidente de Filipinas en Washington dentro de unos días», dijo Rubio.
La visita tendrá lugar en medio de los esfuerzos de Manila por negociar a la baja los nuevos aranceles a los productos del país asiático anunciados por Trump el pasado miércoles, unas tasas del 20 % frente al 17 % estipulado inicialmente.
Una delegación encabezada por la secretaria de Comercio e Industria, Maria Cristina Aldeguer-Roque, viajará a EE. UU. la semana próxima. El objetivo de los oficiales filipinos es obtener un acuerdo económico bilateral o un acuerdo de libre comercio.
El anuncio de este arancel del 20 %, que en principio entraría en vigor el 1 de agosto, abre la puerta para que EE. UU. negocie un nuevo pacto comercial con uno de sus principales socios en materia de defensa en el Sudeste Asiático.
El líder republicano considera que esos gravámenes «son necesarios» para corregir lo que a su juicio son años de políticas y barreras arancelarias que han provocado a Estados Unidos un déficit comercial en sus respectivos intercambios.
Al margen de los aranceles impuestos por Trump, Filipinas ha reforzado sus vínculos de defensa con EE. UU. desde la llegada al poder de Marcos Jr. en 2022.
EE. UU. tiene acceso a nueve bases militares en el país asiático, gracias a un acuerdo establecido en 2014 y ampliado en 2023, y en 1951 ambos países firmaron un Tratado de Defensa Mutua que obligaría a Washington a acudir en ayuda de Manila en caso de un conflicto militar con China.
Manila y Pekín mantienen una creciente disputa soberanista en el mar de China Meridional, donde en los últimos meses se han multiplicado los enfrentamientos entre buques de ambos países.