Palma, 2 jun (EFE).- El presidente del Parlament balear, Gabriel Le Senne, será juzgado por delito de odio tras desestimar la Audiencia de Palma el recurso contra su procesamiento por romper durante un pleno de la cámara una fotografía de republicanas fusiladas en 1937.
El tribunal ha rechazado la apelación que planteó Le Senne el pasado febrero contra su imputación por parte del titular del juzgado de instrucción 1 de Palma, Juan Manuel Sobrino, quien, en contra del criterio de la Fiscalía, ordenó la apertura de juicio al diputado de Vox.
El presidente del Parlament argumentaba en su recurso que la decisión del juez era “ilógica y arbitraria” porque hacía “una interpretación sesgada y parcial de las diligencias practicadas”, en las que no se habían obtenido indicios suficientes para llevarle a juicio por unos hechos accidentales.
La Sección Segunda de la Audiencia da la razón al juez instructor y establece que las cuestiones relativas a la suficiencia de los indicios delictivos de la conducta investigada deben resolverse en fase de juicio oral, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJIB).
El pronunciamiento, que confirma la resolución de apertura de juicio contra la segunda autoridad política de Baleares, llega dos días después de que el Govern autonómico del PP cerrara un acuerdo con Vox para aprobar los presupuestos y la oposición ya anunció que, de ir a juicio, pondrá en marcha el proceso para la remoción de Le Senne como presidente del Parlament.
La Audiencia desestima todos los motivos alegados por la defensa del diputado y subraya que es factible la posibilidad de que los hechos investigados hayan sucedido del modo que relata el juez instructor, algo que deberá determinarse en una vista oral.
El recurso no incide en “la relevancia penal de los hechos investigados, sino en cuestiones relativas a la intencionalidad del investigado” o sobre los indicios en que se ha basado el juez del caso para elaborar el relato con el que argumenta el enjuiciamiento del procesado, abundan los magistrados.
El 18 de junio del año pasado, durante el debate de toma en consideración de la derogación de la Ley de Memoria Histórica de las islas, Le Senne rompió una fotografía en la que aparecían las militantes comunistas Aurora Picornell y Antònia y Maria Pascual, conocidas como ‘Las rojas del Molinar’, que fueron asesinadas por falangistas la Noche de Reyes de 1937 en Mallorca.
El presidente arrancó la imagen exhibida en el ordenador de la vicepresidenta segunda de la mesa, la socialista Mercedes Garrido, actuando, a juicio del instructor, con “rabia, ira y desprecio” hacia lo que representan las fotografías.
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Mallorca, en su nombre y en el de los familiares de las republicanas represaliadas de la fotografía, pidió en su escrito de acusación contra el presidente del Parlament 20 meses de prisión, una multa de alrededor de 9.900 euros y el pago de una indemnización de 30.000 euros.
Por su parte, la acusación popular, que ejerce el colectivo ‘Estimada Aurora’, reclama para Le Senne 16 meses de cárcel, 30.000 euros de multa, otros 30.000 euros de indemnización, la suspensión de cargo público por tres años y medio y una inhabilitación por diez años.
Las otras dos acusaciones, el Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE) y el Partido Comunista de España (PCE), solicitan que se le imponga a Le Senne cuatro años y 20 meses de cárcel, respectivamente, así como el pago de indemnizaciones desde los 13.000 a los 80.000 euros.
La Ley de Memoria Democrática que suscitó el debate en el que Le Senne perdió los nervios, según admitió él mismo, finalmente no se derogó porque el PP se abstuvo después de que Vox impidiera la aprobación de los presupuestos de 2025 el pasado diciembre.
Ahora, recompuestas las relaciones entre los dos partidos para aprobar nuevos presupuestos, la supresión de esa ley vuelve a ser una de las condiciones de Vox aceptadas por el PP.