El primer transexual recibido por el papa: “Francisco me salvó la vida espiritualmente”

- Fotografía de archivo fechada el 30 de marzo de 2016 del extremeño Diego Neria Lejárraga, el primer transexual de la historia en ser recibido por un papa, durante la presentación en Plasencia de su libro autobiográfico "El despiste de Dios, Cuadernos de viaje de un hombre que nació mujer". El papa Francisco falleció este lunes a las 7.35 horas (5.35 GMT) en su residencia de la Casa Santa Marta, anunció en un vídeo mensaje el camarlengo, el cardenal Kevin Joseph Farrel. EFE/Eduardo Palomo

Plasencia, 21 abr (EFE).- El extremeño Diego Neria Lejárraga, que en 2015 se convirtió en el primer transexual de la historia en ser recibido por un papa, ha asegurado que, con aquella visita, el papa Francisco le salvó la vida “espiritualmente” y disipó “todo el dolor” que le había causado la institución durante su vida.

La vida privada de este placentino de 59 años, que en 2007 se sometió a una reasignación de género, se convirtió en pública en 2015 después de conocerse que fue recibido en audiencia privada por el papa Francisco en la Casa de Santa Marta, en la Ciudad del Vaticano, junto a su pareja, Macarena.

“Éramos muy buenos amigos. Ya no es que me recibiera. Es que teníamos una amistad muy bonita. Yo siempre he estado callado con esto, pero yo no perdí nunca el contacto con él. A mí me recibió y me salvó la vida espiritualmente”, ha asegurado este lunes un emocionado Diego Neria en declaraciones a EEE.

El extremeño ha reconocido que el papa Francisco le explicó “muchas cosas que tenía en duda de la institución”.

“Yo le debo mi vida espiritual a él, por ello, es como si se hubiese ido no te voy a decir un padre de forma literal, pero a mí se me ha ido alguien muy importante. Y además muy, muy querido”, ha afirmado.

Neria ha defendido que Francisco “era un hombre que te bastaba un minuto de tenerle delante para saber qué calidad tenía”.

“Y qué forma de proteger y de abrazar a quien lo necesitaba y de estar al lado, que era lo que quería, de la gente humilde. Porque el resto del mundo, los ricos, como les decía, los ricos no lo necesitan tanto”, ha agregado.

Para Diego Neria, el papa, “con un abrazo, logró disipar todo el dolor” que le había dejado una institución por la que se ha sentido una persona “machacada” y “muy maltratada” toda su vida.

“Una institución que él capitaneaba y a la que ha querido, sin ninguna duda, abrir puertas y dejar que entre el aire fresco y ha hecho lo que le han dejado”, ha apuntado.

Por último, ha hecho hincapié en que no tiene ninguna duda de que el papa Francisco “hubiese sido un revolucionario”.

“Para mí era un samurái absoluto”, ha concluido.