Madrid, 30 jun (EFE).- El PSOE ha asumido este lunes el impacto del encarcelamiento de su exsecretario de Organización Santos Cerdán, cuyo futuro los dirigentes socialistas dejan en manos de los tribunales, una vez que creen que su partido ha actuado con contundencia contra él, pero el PP lo aprovecha para señalar a Pedro Sánchez por sus vínculos con el político navarro.
El propio líder socialista ha mostrado su respeto a la decisión del juez Leopoldo Puente y ha remarcado que el PSOE actuó debidamente desde el primer minuto, mientras la número dos del partido y vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero, se ha limitado a apuntar que el juez tendrá «sus motivos y sus razones» para enviarlo a prisión.
El magistrado le atribuye un presunto papel en una trama de reparto de mordidas por supuestas adjudicaciones irregulares de obra pública, en el marco de sus investigaciones del caso Koldo.
Desde Sevilla, Sánchez ha defendido la «contundencia» con la que el PSOE actúo, mientras que Montero ha ido más allá y ha mostrado su convencimiento de que, «si la Fiscalía y el Tribunal así lo han considerado, tendrán sus motivos y sus razones».
También ha dicho que en todo caso es un «asunto de una persona que no tiene que ver» con la formación, porque ya está de baja en el PSOE, y ha defendido que la «justicia llegue hasta el final para averiguar todo lo que ha ocurrido».
Por su lado, Sánchez ha trasladado «la máxima colaboración con la justicia», donde debe dirimirse las responsabilidades penales, y el respeto a su labor, subrayando que desde el punto de vista político la posición del PSOE es «muy distinta» a otros partidos, que «no asumen ningún tipo de responsabilidad», en referencia al PP.
Fuentes del Gobierno han admitido que el hecho de que el juez decretara la prisión sin fianza no ha sido una sorpresa y han asegurado que esa circunstancia, dentro de la gravedad, no cambia nada y no afecta al Ejecutivo.
A su vez, fuentes de la Ejecutiva socialista han reconocido a EFE que el partido afronta «duros momentos» tras la entrada en prisión de Cerdán, pero lo asumen con el ánimo de «mejorar» y la seguridad de que actuaron a tiempo.
Esos comportamientos, inciden, no tienen nada que ver con los valores que defienden los socialistas, cuyo partido está formado por una amplía mayoría de «hombres y mujeres honestos que entienden la política como un servicio público».
El PP apunta a Sánchez
El PP ha utilizado la noticia para volver a exigir elecciones anticipadas y apuntar a Sánchez, quien «debe abandonar inmediatamente la Moncloa».
Según ha dicho la secretaria general del partido, Cuca Gamarra, el caso Koldo ha dado un «salto cualitativo» con la prisión sin fianza de Cerdán y ha hecho un llamamiento a los socios de Gobierno para que apoyen una eventual moción de censura impulsada por Alberto Núñez Feijóo.
«El sanchismo está en prisión sin fianza», ha proclamado Gamarra, quien ha hecho hincapié en la relación entre el jefe del Ejecutivo y el exsecretario de Organización del PSOE.
«Si uno cae judicialmente, el otro debe caer políticamente», ha sentenciado la secretaria general, quien cree que se ha llegado «al corazón del sanchismo», porque el presidente es «el jefe de una organización criminal» al ser «el jefe de Cerdán, de Ábalos y de Koldo».
Por su lado, el líder de Vox, Santiago Abascal, ha escrito un escueto mensaje en X en el que ha asegurado que «no basta con uno. Falta el uno», en referencia a Sánchez. «¡Todos a la cárcel!», ha espetado.
Sumar y Comuns piden personarse en el caso
Sumar ha anunciado por su lado que pedirá personarse como acusación popular en el caso Koldo junto a los comunes y ha defendido que «caiga quien tenga que caer».
Una de las líderes de Movimiento Sumar, Lara Hernández, ha afirmado que «se tiene que producir una clarísima depuración de responsabilidades en el ámbito político y también en el ámbito judicial».
En su opinión, hay que aplicar un giro de 180 grados a lo que queda de legislatura y eso pasa porque el PSOE ponga un «cortafuegos» a la corrupción interna, a la vez que impulsa la denominada «agenda social» aún pendiente.