Madrid, 13 jun (EFE).- El PSOE intenta recomponerse 24 horas después del ‘shock’ provocado por la dimisión de Santos Cerdán y, en medio de la «tristeza» y la decepción causadas por las revelaciones del informe de la UCO, busca cómo recuperar la credibilidad que, admiten, ha quedado «tocada».
Así lo ve, por ejemplo, el presidente de Asturias, Adrián Barbón, quien ha remarcado este viernes que el PSOE «tiene muy claro que con la corrupción» aplica «tolerancia cero» y ha defendido la respuesta dada ayer por el líder de los socialistas y jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, para restaurar esa credibilidad
También el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, y el de Transformación Digital, Óscar López, han defendido la actuación del partido y han dejado claro que ahora mismo no está encima de la mesa la posibilidad de que Sánchez se someta a una cuestión de confianza en el Congreso.
Bolaños ha asegurado que en el informe de la UCO no hay ningún indicio de una posible financiación irregular del PSOE y ha reconocido que este jueves fue un día triste para el partido.
«Comprendo la indignación, el rechazo, el disgusto y la decepción de tantos ciudadanos que ayer conocieron como nosotros el informe de la UCO. No solo lo comprendo, sino que lo comparto», ha destacado.
Según ha explicado Óscar López, Cerdán negó «a la cara» hasta el último momento su supuesta implicación en el caso Koldo al presidente del Gobierno quien, ha adelantado, va a seguir trabajando pese a las «muchas» dificultades que, según ha dicho, hay tanto dentro como fuera de España.
En los mismos términos se ha expresado el portavoz socialista en el Congreso, Patxi López, quien en un mensaje en X ha reconocido que el caso de Cerdán ha sido «el mayor golpe» a las conciencias de los socialistas. «Tan duro como decepcionante», ha escrito.
El impacto en el PSOE
En privado, miembros del partido admiten seguir impactados por lo sucedido ayer y subrayan que aún queda mucho tiempo para que puedan reponerse, incluso personalmente, de esta situación.
Para algunos la respuesta del PSOE ante el caso de Cerdán ha generado cierta tranquilidad; creen que con las explicaciones de Sánchez se ha ganado tiempo para tomar decisiones y hacer los cambios que correspondan.
Fuentes de la Ejecutiva Federal consultadas por EFE apuntan a que un proyecto «ni se construye ni se destruye por dos personas» y animan a la militancia a seguir confiando en su secretario general porque la alternativa al gobierno de coalición, recuerdan, sigue siendo un pacto entre el PP y Vox.
Reconocen que el día de ayer fue «muy duro y de mucha decepción» pero recalcan que tras la publicación del informe vino «la tolerancia cero (hacia la corrupción), la rapidez, la contundencia y un Sánchez dolido, pero acertado».
No obstante, también hay voces críticas con la actuación de Sánchez, como la del alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, quien ha reclamado un congreso extraordinario federal para que la militancia pueda opinar sobre la situación del partido, y ha afirmado que, si él fuera el secretario general, no se presentaría a la reelección.
«Siento mucha vergüenza, mucha repugnancia, mucha indignación por lo que ha sucedido», ha aseverado.
En la misma línea, el alcalde de León, José Antonio Diez, ha pedido a Sánchez que asuma sus responsabilidades para que el partido «empiece a forjar un nuevo tiempo» en el que «la ciudadanía se sienta plenamente identificada».
En su opinión, se necesitan «explicaciones contundentes, no vaguedades ni pucheritos».
Sumar aprieta a su socio de Gobierno
Sumar, por su parte, no ve necesaria por el momento una moción de confianza, pero ha elevado este viernes el tono y ha reconocido, según ha dicho el ministro de Cultura y portavoz de la formarción, Ernest Urtasun, que «la confianza está rota» entre los socios de la coalición del Gobierno.
Por eso, en la misma línea que se expresó ayer la vicrepresidenta tercera, Yolanda Díaz, que pidió un «reseteo» de las relaciones, Urtasun ha reclamado medidas «contundentes» para poder llegar al final de la legislatura, aunque ha rechazo que la solución sea entregar el Gobierno «al partido de la Gürtel y a la extrema derecha».
El portavoz de Sumar ha dicho que casos de corrupción como este «revientan por dentro de indignación» a los miembros de su formación. Esperan ahora que la comisión de seguimiento del acuerdo de coalición se reúna lo antes posible y que se tomen «en serio» la lucha contra este tipo de comportamientos.