Granada, 16 sep (EFE).- Una investigación arqueológica en la necrópolis de Los Milanes de Abla (Almería) ha demostrado que el rito funerario de la cremación empezó hace 4.800 años, un milenio y medio antes de lo que se pensaba.
Un equipo científico de la Universidad de Granada (UGR) ha obtenido estos sorprendentes resultados en la necrópolis megalítica de Los Milanes al localizar en una de sus tumbas más de 28.000 fragmentos óseos pertenecientes a una veintena de individuos que fueron cremados y posteriormente depositados en el interior del monumento.
Los hallazgos muestran que la cremación fue practicada 1.500 años antes de lo que se pensaba y que, por tanto, durante la Edad del Cobre la inhumación convivió con la cremación, lo que demuestra una complejidad social y cultural hasta ahora inadvertida.
La necrópolis de Los Milanes se localiza en Abla (Almería), un enclave en el que se han identificado 18 sepulturas megalíticas con cámaras funerarias de planta circular u ovalada que sirvieron como lugares de enterramiento colectivo.
Tres de estas tumbas han sido excavadas entre 2023 y 2025 por un grupo de investigación de la UGR responsable de este hallazgo.
La investigadora de la UGR Paula Becerra ha detallado que el estudio antropológico ha identificado 28.740 fragmentos óseos y 1.209 restos dentales que han sido estudiados de forma individualizada.
Se trata de un conjunto de muestras antropológicas altamente fragmentadas, la inmensa mayoría no supera los dos centímetros de longitud, y con una amplia gama de coloración que va desde marrón a blanco, pasando por negro, gris y azul.
Además, tienen patrones de fractura y cambios en la forma de los huesos que enfatizan la exposición a temperaturas superiores a 650 grados centígrados.
Otro aspecto de interés consiste en una clara diferencia en la exposición al fuego de las partes anatómicas izquierda y derecha del cuerpo humano, ya que el calor afectó en mayor medida al lado izquierdo, lo que indica una posición deliberada del cuerpo en la pira funeraria.
El análisis químico de los restos denota las diferentes condiciones de cremación en cuanto a la temperatura, presencia de oxígeno y tiempo de exposición al fuego.
La cianamida encontrada se relaciona con la combustión de cuerpos cubiertos con algún tipo de sudario y las evidencias describen una práctica funeraria de cremación que debió realizarse poco después de la muerte, para posteriormente trasladar los restos a la cámara.
En la cámara funeraria se depositaron como mínimo 21 individuos de todas las edades y de ambos sexos que murieron hace 4.800 años, según la datación mediante carbono 14 (C14).