París, 6 mar (EFE).- El Tribunal de Estrasburgo rechazó definitivamente la demanda del candidato ultranacionalista rumano Calin Georgescu, quien pedía la validez del escrutinio presidencial de noviembre de 2024 en el que había acabado en primer lugar, pero que fue anulado por el Constitucional rumano por injerencias rusas.
En una decisión publicada este jueves, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) estimó que la demanda de “injerencia política” interpuesta por Georgescu es “inadmisible”, pues, de acuerdo con los tres jueces, hay “una manifiesta falta de fundamento” teniendo en cuenta “la estructura constitucional” de Rumanía.
El candidato ultra y prorruso había invocado en su demanda que, con la anulación de la primera vuelta de noviembre de 2024 por parte del Constitucional, se había vulnerado el derecho a unas elecciones libres, a un proceso justo, a la libertad de expresión y el derecho a un recursos efectivo.
El TEDH ya había desestimado en enero una demanda sobre medidas cautelares interpuesta por Georgescu para que se respetaran los resultados de la primera vuelta.
Los jueces europeos no vieron entonces un “riesgo inminente” de que el candidato sufriese un daño “irreparable” en sus derechos si no se adoptaban esas medidas que reclamaba.
La decisión de este jueves del TEDH es de carácter “definitivo”, lo que cierra las puertas a nuevas demandas antes de la elección de mayo por parte de Georgescu, actualmente investigado por financiación ilegal y apoyado públicamente por el magnate Elon Musk y por decenas de miles de rumanos que han salido últimamente a las calles.
En la primera vuelta de las presidenciales celebrada el pasado 24 de noviembre, el candidato ultranacionalista dio la sorpresa gracias a una campaña en redes sociales que, según la Justicia, estuvo supuestamente apoyada por Rusia en una operación de injerencia.
Ganó con el 23 % de los votos, por delante de la candidata liberal-nacionalista Elena Lasconi, que obtuvo el 19 % de los sufragios.
El Tribunal Constitucional rumano anuló el proceso electoral el 6 de diciembre, por lo que la elección se repetirá en mayo, con una primera vuelta el día 4 y una segunda vuelta posiblemente el 18.
Las dos decisiones de Estrasburgo contra Georgescu se unen al parecer de la Comisión de Venecia del Consejo de Europa, que consideró en enero que un tribunal constitucional sí que es competente para anular unas elecciones únicamente en circunstancias excepcionales.