El verano será más cálido de lo normal tras la quinta primavera más lluviosa en 64 años

Una persona se refresca en una fuente del centro de Valencia en una jornada de temperaturas veraniegas en la Comunidad. EFE/Ana Escobar

Madrid, 13 jun (EFE).- El verano, que comienza el próximo 21 de junio, se prevé más cálido de lo normal, con mayor probabilidad en la vertiente mediterránea y en ambos archipiélagos, tras una primavera muy lluviosa, la quinta desde 1961 y la tercera del siglo XXI, gracias a las precipitaciones acumuladas en marzo.

En rueda de prensa para presentar las características climáticas de la primavera y la predicción para el verano, el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén Del Campo, ha avanzado que en este verano, que arranca la próxima semana, hay una probabilidad muy alta, casi del 70 por ciento, de que el trimestre sea más cálido.

Además, existe también una alta probabilidad (entre el 50 % y el 70 %) de que este verano esté entre el 20 por ciento de los más calurosos registrados en los últimos años: «Estamos ante la nueva normalidad , con veranos muy cálidos», ha aseverado Del Campo.

Con respecto a las precipitaciones en la época estival, «no se observa una tendencia clara», ha explicado el portavoz, quien ha recordado que esta estación suele ser seca en general, aunque a veces interrumpida por episodios de tormentas.

Características de la primavera

En lo referente a la primavera, el portavoz ha explicado que desde los años 90, las primaveras en España han sido cada vez más cálidas: La última primavera más fría de lo normal fue en 2018; desde entonces, todas han sido «normales, cálidas o muy cálidas».

Aunque esta primavera de 2025 se ha percibido «como fresca por algunos momentos puntuales», los datos indican que ha tenido un carácter normal, y de hecho, «si se hubiera registrado en el siglo XX, se habría considerado cálida, lo que refleja cómo ha cambiado el clima en las últimas décadas», ha apuntado Del campo.

Temperaturas

La primavera dejó una temperatura media en la España peninsular de 12,7 grados, solamente 0,3 grados por encima de lo normal en esta estación; Ha sido la decimoctava más cálida desde el comienzo de la serie en 1961, y la decimotercera más cálida del siglo XXI.

Por áreas geográficas, tuvo un carácter cálido en el tercio noroeste de la península, en el sur, en el este de Castilla-La Mancha y en el Levante, incluso muy cálido en zonas costeras y en áreas de Galicia y de Castilla y León. En el resto, fue normal con áreas en las que incluso fue fría.

En los archipiélagos, Baleares fue muy cálida, mientras que en las Canarias varió mucho dependiendo de la isla: las más frías fueron las más occidentales.

Por meses, marzo fue muy frío, «el primer mes con carácter muy frío desde noviembre de 2021», y abril fue muy cálido, «de alguna manera compensó a marzo», mientras que mayo arrojó temperaturas, que en el conjunto de la estación, estuvieron cerca de su promedio normal.

El portavoz ha explicado que aunque mayo fue normal, a finales de mes tuvo lugar un episodio muy cálido, con récords de temperatura en diez observatorios de la Aemet, entre los que sobresalen los 40,7 grados en los aeropuertos de Córdoba y Sevilla y 37,5 grados en Zaragoza, récord de su serie.

En cuanto a valores bajos, destacan los de mediados de marzo, con -7 grados en el Puerto de Navacerrada y -6,2 grados en Molina de Aragón; también hay que resaltar la temperatura máxima de 5,2 grados en Guadalajara, récord de máxima más baja en este observatorio en primavera, aunque la serie es corta (arranca en 2012).

Precipitaciones

Fue muy húmeda, con 278,8 litros por metro cuadrado en la España peninsular, es decir, el 151 % del valor normal del trimestre en el periodo de referencia 1991-2020, lo que la convierte en la quinta más húmeda desde el comienzo de la serie (1961) y la tercera del siglo XXI, detrás de las de 2018 y 2013.

En Canarias fue la séptima más húmeda desde 1961 y la segunda del siglo XXI, detrás de la primavera de 2011.

Fue húmeda o muy húmeda en casi toda la península, salvo en áreas del norte de Galicia y de Castilla y León, y en puntos aislados del noreste peninsular y del Levante, que mostraron carácter normal o seco. En los archipiélagos, fue húmedo o normal, destacando zonas puntuales muy húmedas en las islas más montañosas.

Por meses, marzo fue muy húmedo con 148,8 litros por metro cuadrado sobre la España peninsular, es decir, el 251 por ciento del valor normal del mes (periodo de referencia: 1991-2020): «Fue el tercer marzo más húmedo desde 1961, solo por detrás de 2018 y 2013».

«Se ha tratado de un mes excepcional en cuanto a récords de precipitaciones», ha señalado el portavoz, quien ha detallado registros históricos en catorce estaciones de la red principal que han batido récords, como el Puerto de Navacerrada, con 952 litros, que supera el récord anterior de 230 litros.

En la estación de Madrid/Retiro se acumularon 418 litros, cifra próxima a lo que suele llover en un año completo, y que supera el récord anterior de 120 litros; Huelva, con 339 litros, superó el registro máximo previo de 102 litros.

Por su parte, abril fue húmedo, con un 111 % del valor normal del mes y mayo, también normal en cuanto a precipitaciones, con el 90 % del valor normal del mes en la España peninsular.