El voto de un concejal tránsfuga del PP entrega la alcaldía de Noia (A Coruña) al PSOE

El socialista Francisco Pérez Caamaño, con el bastón de mando después de la moción de censura en la que ha sido proclamado nuevo alcalde de Noia (A Coruña), este lunes. El regidor saliente, Santiago Freire (PP), llevaba al frente del ayuntamiento de la localidad desde el año 2016. EFE/Xurxo Martínez

Noia (A Coruña), 11 ago (EFE).- El voto de un concejal tránsfuga del PP, Luis Alamancos, ha convertido este lunes al concejal socialista Francisco Pérez Caamaño en el nuevo alcalde del municipio coruñés de Noia, después de que prosperase la moción de censura presentada contra el popular Santiago Freire.

Freire gobernaba en coalición con la formación Noieses Independentes Agrupados (NOIA), aunque había perdido la mayoría plenaria desde la salida de Alamancos, cuyo voto, unido al de PSOE, Marea Cidadá y BNG ha decantado la balanza en favor de un cambio en el Ejecutivo local.

Las fuerzas firmantes de la iniciativa acusaron al gobierno saliente en el escrito de esta moción de falta de transparencia en la contratación, de deficiencias en la gestión de las infraestructuras y servicios públicos y, en definitiva, de gobernar «de espaldas» a la ciudadanía.

Mientras tanto, Freire ha defendido la solvencia económica del ayuntamiento y ha reprochado a Alamancos que «traicionase» la confianza mostrada al incluirlo en las listas.

El PSOE encabezará un Gobierno municipal en el que también estará Marea Cidadá, aunque no el BNG, que permanecerá al margen, con un apoyo condicionado al cumplimiento de lo pactado.

Mociones de censura de ida y vuelta

Santiago Freire (PP), regidor saliente de Noia (A Coruña), interviene en la moción de censura en la que el socialista Francisco Pérez Caamaño ha sido proclamado nuevo alcalde del municipio. Freire llevaba al frente del ayuntamiento desde el año 2016. EFE/Xurxo Martínez

La salida de Santiago Freire de la alcaldía noiesa se produce de una manera idéntica a la que se dio su llegada, ya que accedió al cargo tras presentar una moción de censura contra Miguel Paz, del PSOE, que en aquel momento encabezaba un gobierno de coalición con NOIA, grupo que luego pasó a formar parte del Ejecutivo popular.

La de Noia es la primera moción de censura que se aprueba en un ayuntamiento gallego en este mes de agosto, pero no será la última; dado que mañana mismo se votará el relevo de Roberto Castro de la alcaldía de Touro (A Coruña) y la semana que viene la regidora de Fisterra (A Coruña), Áurea Domínguez, se enfrentará a este proceso.

Todo ello es posible gracias al pronunciamiento del Tribunal Constitucional que elimina el veto a que los concejales tránsfugas puedan formar parte y promover este tipo de iniciativas; lo que ha deparado un efervescente verano en los consistorios gallegos.

Desde las pasadas elecciones municipales de 2023, ocho ayuntamientos de Galicia han enfrentado diferentes mociones de censura, que, si todo transcurre como está previsto, terminarán dando cinco alcaldías al PP (Viveiro, Outes, Forcarei, Touro y Fisterra), dos al PSdeG (O Irixo, Noia) y una a un partido independiente (Muxía).

Santiago Freire (PP) (d), regidor saliente de Noia (A Coruña), entrega el bastón de mando al socialista Francisco Pérez Caamaño (i) tras la moción de censura en la que este último ha sido proclamado nuevo alcalde del municipio. Freire (PP) llevaba al frente del ayuntamiento desde el año 2016. EFE/Xurxo Martínez