España logra una séptima plaza que no satisface al joven y ambicioso equipo nacional

La nadadora española Carmen Weiler Sastre, en una foto de archivo durante los Mundiales de natación en Singapur. EFE/EPA/RUNGROJ YONGRIT

Redacción deportes, 2 ago (EFE).- El equipo español mixto de relevos no pudo meterse en la pelea por el podio tras concluir este sábado en una más que meritoria séptima posición en la final del 4×100 libre de los Mundiales de Singapur, en la que se impuso Estados Unidos con un tiempo de 3:18.48 minutos, nuevo récord del mundo.

Una marca inalcanzable para el jovencísimo equipo español, integrado por Sergio de Celis, Luca Hoek, Carmen Weiler y Maria Daza, que se había fijado como objetivo mejorar el récord de España que ellos mismos establecieron en las preliminares con un crono de 3:24.48.

Pero ni así hubiera podido pelear por las medallas el equipo español, como reflejan los 3:21.35 en los que necesitó nadar Francia para colgarse la medalla e plata por detrás de un cuarteto ruso, que tuvo que fijar un nuevo récord de Europa -3:19.68- para subir al segundo escalón del podio.

«Aún nos queda mucho por mejorar, pero en los próximos años seguro que estaremos en más finales y no para ser séptimos u octavos», señaló De Celis en declaraciones difundidas por la Federación Española de Natación.

Y es que la actuación del equipo español en la piscina del Arena de Singapur permite soñar con un brillante futuro para el jovencísimo equipo español, que cuenta con una media de edad de poco más de 19 años.

Fue precisamente el más veterano de todos, Sergio de Celis, de 25 años, el encargado de lanzar el relevo español en una final en la que tras los primeros 100 metros España ocupaba a octava posición con un tiempo de 48.72 segundos, 20 centésimas más que en las preliminares.

Una posición que Luca Hoek, de tan sólo 17 años, mejoró en dos plazas, tras nadar como ya hiciera en las series en 47 segundos, para llevar al equipo español al sexto puesto al paso por el ecuador de la prueba.

Plaza que no pudo defender Carmen Weiler, de 20 años, que se vio superada por el equipo neerlandés para tocar la pared en séptima posición a falta la última posta en la que María Daza, de 17, aguantó el acoso de Alemania para concluir séptima.

Un resultado que no acabó de satisfacer al joven y ambicioso cuarteto español que, como recalcó De Celis, quiere subir bastantes más puestos en el escalafón en los próximos años.