Bruselas, 10 mar (EFECOM).- España pidió este lunes a la Comisión Europea (CE) ir “más allá” en sus propuestas para financiar el rearme de la Unión Europea (UE), concediendo a los países no sólo préstamos sino también subvenciones financiadas con la emisión de deuda europea.

“Las propuestas de la Comisión Europea son bienvenidas, pero nosotros creemos que hay que ir incluso más allá a la hora de pensar que esa respuesta europea tiene que dar acceso a los Estados miembros a préstamos en las condiciones en las que pueda financiarse la Comisión, pero también a un elemento de transferencias”, dijo el ministro de Economía, Comercio y Empresa de España, Carlos Cuerpo.
El titular de Economía español se pronunció así a su llegada a un encuentro del Eurogrupo, en el que los ministros abordaron el plan para movilizar hasta 800.000 millones de euros para impulsar la defensa europea a la espera de que el Ejecutivo comunitario presente las propuestas legislativas con los detalles del mismo en los próximos días, previsiblemente el 19 de marzo.
El plan contempla flexibilizar las reglas fiscales europeas, a través de las llamadas cláusulas de escape nacionales, para permitir que los países aumenten su gasto en defensa hasta un 1,5 % del PIB anualmente, así como crear un instrumento financiado con deuda común a altura de 150.000 millones de euros que se distribuirían después en forma de créditos a los países.
Cuerpo explicó que España esperará a conocer los detalles de la propuesta para decidir si accede a este nuevo instrumento, pero insistió en que Bruselas debería integrar también las transferencias directas (que a diferencia de los créditos no tendrían que ser devueltas por los países) en la “respuesta más inmediata”, sin esperar al próximo presupuesto comunitario plurianual que solo estaría disponible en 2028.
España, subrayó el ministro, considera que la UE debe costear este refuerzo de la defensa con financiación tanto europea como nacional y, en este sentido, consideró “fundamental” utilizar “toda la flexibilidad” de las reglas fiscales para que el gasto en defensa “no compita con otros gastos importantes a nivel nacional como el escudo social u otros”.
En sintonía con la posición española está la de Francia, cuyo presidente, Emmanuel Macron, advirtió el jueves pasado de que el plan de la Comisión a corto plazo “no es suficiente” y se debe ir más lejos en cuanto a las posibilidades de endeudamiento común, aunque sin reclamar directamente subvenciones.
Su ministro de Economía, Eric Lombard, puso hoy el acento en que se financie la compra y desarrollo de “productos europeos”.
Sin embargo, otros países tienen dudas en este aspecto y rechazan, en concreto, la idea de usar nuevas emisiones de deuda para transferir recursos a los Estados miembros a fondo perdido.
“Ya hemos dicho que Países Bajos no está a favor de los eurobonos. Una vez más, la mayoría del Parlamento no quiere esto y el Gobierno neerlandés tampoco lo quiere”, enfatizó el ministro de Finanzas de Países Bajos, Eelco Heinen.
También el ministro alemán de Finanzas en funciones, Jörg Kukies, se mostró “escéptico” respecto a los llamados eurobonos si son para distribuir fondos a los países para que “hagan cosas nacionalmente”, pero precisó que su país está “abierto” a utilizar “financiación común” para invertir en “proyectos europeos de defensa”.
Por lo que respecta a la flexibilidad fiscal, sin embargo, Alemania se ha mostrado partidaria no solo de suavizar las reglas durante unos años – Bruselas prevé activar las cláusulas durante cuatro años – sino de revisarlas a más largo plazo para permitir mayor gasto en defensa, algo que no ven necesario ni la Comisión Europea ni otros socios europeos.
“Nosotros por supuesto que estamos abiertos a esa discusión, pero a corto plazo con la simple activación de la cláusula de escape creemos que hay suficiente espacio para responder desde el ámbito nacional con ese pulmón presupuestario nacional a estas necesidades”, dijo el ministro de Economía español.
Por su parte, el ministro belga, Vincent Van Peteghem, advirtió de que cualquier aumento del gasto nacional en defensa tendrá que ser “compensado” en los presupuestos nacionales para no poner en riesgo la “sostenibilidad fiscal a largo plazo” de las finanzas públicas, y abogó por usar también financiación europea, en particular por impulsar las compras conjuntas en este ámbito.
Los ministros volverán a debatir la cuestión con todos los países de la UE en una cena esta noche y en su consejo (Ecofin) de mañana.