Naciones Unidas, 12 sep (EFE).- Estados Unidos se distanció este viernes de Rusia y advirtió al país eslavo que «defenderemos cada pulgada del territorio de la OTAN», según dijo la representante de EE.UU. en la ONU, Dorothy Shea, en una sesión de emergencia del Consejo de Seguridad pedida por Polonia.
La sesión fue solicitada en respuesta a la incursión de al menos 19 drones rusos en el espacio aéreo polaco durante la noche del martes al miércoles pasado, los cuales fueron derribados de inmediato por la defensa aérea de Polonia. Se trata del primer acto de agresión directa de Rusia contra un miembro de la OTAN desde el inicio de la guerra en Ucrania.
Esas acciones de Rusia «muestran una inmensa falta de respeto por los esfuerzos de buena fe de Estados Unidos para poner fin a este conflicto», dijo Shea dirigiéndose al representante de Rusia.
Shea subrayó que su país ha consentido «esfuerzos extraordinarios para propiciar el fin de la guerra (en Ucrania)», pero se ha encontrado con que Rusia no hace sino intensificar los ataques desde que terminó la cumbre entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo ruso Vladímir Putin en Alaska, concebida precisamente para buscar el fin de la guerra.
La diplomática dejó la puerta abierta a que la violación del espacio aéreo polaco fuera un error, al señalar que se produjo «intencionadamente o de otro modo».
Pero en su intervención posterior, el embajador ruso ante la ONU, Vasili Nebenzia, no habló de ningún error, sino que se dedicó a negar el suceso como si fuera una invención, «unas acusaciones sin fundamento contra nosotros».
Según Nebenzia, el rango máximo de los drones usados esa noche en su ataque contra Ucrania «no excede los 700 kilómetros, lo que hace físicamente imposible que alcancen territorio polaco».
Nebenzia descalificó de paso «el arrebato histérico» de los países de la Unión Europea que, según él, han caído en los intentos de Ucrania de extender el conflicto más allá de sus fronteras.