Eurocomisaria de Igualdad estará en Marcha del Orgullo de Budapest solo si ésta es legal

Imagen de Archivo de la comisaria europea de Igualdad, Hadja Lahbib. EFE/EPA/OLIVIER MATTHYS

Budapest, 20 jun (EFE).- La comisaria europea de Igualdad, Hadja Lahbib, acudirá a la Marcha del Orgullo en Budapest el próximo 28 de junio únicamente si el evento está autorizado por el Gobierno ultranacionalista de Hungría, informó este viernes el portal de noticias independiente Nepszava.

«Hajda Lahbib se reunirá con representantes de las autoridades húngaras y de organizaciones civiles, pero actuará conforme a la legislación vigente en lo que respecta a (la marcha del) Orgullo», cita el portal a un portavoz de la Comisión Europea.

El vocero agregó que la decisión de autorizar eventos «es una responsabilidad de las autoridades locales», pero destacó que «la libertad de reunión es un derecho fundamental y la esencia de nuestras democracias».

La Policía húngara anunció ayer que prohíbe celebrar el 28 de junio la marcha convocada por el ayuntamiento progresista de Budapest para burlar el veto del Gobierno del primer ministro Viktor Orbán contra el evento.

La Policía aludió, entre otros, a las leyes que protegen el desarrollo considerado como «adecuado» de los menores de edad, que se ha determinado como superior al derecho de reunión.

A pesar de esta prohibición, el alcalde de Budapest, Gergely Karácsony, aseguró que la marcha no requiere permiso, por lo que Budapest no registró el evento ante la Policía, por lo que la prohibición anunciada «no es relevante».

«El Ayuntamiento de la capital organiza el 28 de junio el día de la libertad húngara, la fiesta del Orgullo de Budapest, como un evento municipal. Y punto», afirmó el edil en Facebook.

Los organizadores de la Marcha del Orgullo aseguraron ayer que decenas de políticos y activistas de derechos civiles de más de 30 países y casi 70 europarlamentarios han anunciado su participación en la concentración de Budapest, entre ellos, el ministro español de Cultura, Ernest Urtasun.

Desde su llegada al poder en 2010 con una mayoría de dos tercios en el Parlamento, el Gobierno de Orbán viene limitando los derechos de la comunidad LGTB+.

En 2011 fijó en la Constitución que el matrimonio es la unión de un hombre y una mujer, posteriormente prohibió el registro legal del cambio de sexo e hizo imposible la adopción de niños por parejas del mismo sexo.

En 2024, se aprobó una ley que vincula la homosexualidad con la pedofilia y prohíbe hablar de la homosexualidad y el cambio de sexo a menores de edad, sea en las escuelas o en los medios dedicados a menores.

Las autoridades húngaras también siguen ignorando, según denuncian ONG, una sentencia de 2018 del Tribunal de Justicia de la Unión Europea de reconocer los matrimonios del mismo sexo contraídos en otros países de la Unión Europea (UE).