Guayaquil (Ecuador), 7 may (EFE).- Familiares de los presos recluidos en La Roca, la cárcel de máxima seguridad de Ecuador, que alberga a reos como el exvicepresidente correísta Jorge Glas, realizaron este miércoles un plantón frente a la prisión para exigir al Gobierno que reanude las visitas, pues aseguraron que no han podido ver a sus familiares desde hace varios meses.
Con carteles con mensajes como: ‘Derecho a la visita’, ‘No tratos crueles’ o ‘Necesitamos justicia’, los familiares de los presos denunciaron que hay quienes no han podido ver a sus parientes desde hace dos años y que no han tenido una respuesta coherente por parte del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad (SNAI), institución estatal que administra las cárceles.
“Nos dicen que tenemos que esperar a que se den las visitas. Dijeron que iba a haber visitas en abril, pero no hubo”, señaló Dana Mora a EFE, quien tiene a su cuñado recluido en La Roca desde hace un año y medio, pero nadie de su familia sabe nada de él desde octubre pasado.
Otro de los asistentes fue Alfredo Méndez, quien participó del plantón porque tiene a un pariente y a dos conocidos en La Roca que no ha podido ver desde hace dos años. Aseguró que el Gobierno se está “burlando de los familiares”.
“Hemos sabido por medio de los guías que ellos están bien, que quieren que los visiten. Ellos (los guardias carcelarios) nos hacen saber lo que está pasando adentro, que es desastroso”, mencionó Méndez.
Además de la falta de visitas, Méndez aseguró a EFE que los presos tampoco reciben presuntamente medicinas para sus enfermedades, ni se los alimenta bien y pidió que “los derechos de los presos sean tomados en cuenta”.
“No se está dando, como dijo el señor presidente, oportunidad de vida, que iban a tener una comida saludable, que iban a tener por lo menos una medicina. Sabemos que hay personas que están enfermas de los pulmones, con tuberculosis”, agregó.
“Hay personas aquí que tienen familiares que están enfermos, que piden que por lo menos los lleven a un hospital para ver cómo siguen y que sigan cumpliendo sus dos, tres, cuatro años que les han puesto, pero que sean conscientes de que el preso tiene que seguir viviendo”, aseveró.
Los familiares se concentraron durante al menos tres horas frente a la cárcel ubicada en la ciudad de Guayaquil y cerraron por varias ocasiones la única vía de acceso al centro carcelario, que comparte entrada con otra prisión.
Hasta el mediodía de este miércoles el SNAI no se pronunció sobre las denuncias y pedidos de los familiares de las personas presas.
Una cárcel con políticos y empresarios
La cárcel La Roca fue construida en el 2008 para albergar a los presos de mayor peligrosidad, aunque en los últimos años también se ha encerrado en ese centro a políticos y otras personas procesadas por corrupción.
Hasta finales de marzo estaban recluidos en ese centro carcelario unas 77 personas, según los últimos datos oficiales.
Uno de los reclusos es el exvicepresidente correísta, Jorge Glas, procesado y sentenciado por delitos de corrupción, quien ingresó en abril de 2024 después de que la Policía invadiera la Embajada de México en Quito para detenerlo, lo que provocó la ruptura de las relaciones diplomáticas con ese país.
Además de Glas, en La Roca están el exasambleísta del conservador Partido Social Cristiano (PSC) Pablo Muentes, sentenciado a 13 años de cárcel por delincuencia organizada, y Daniel Salcedo, un empresario vinculado a varios casos de corrupción y condenado por delincuencia organizada al formar parte de un trama de corrupción judicial, creada por el difunto narcotraficante Leandro ‘el Patrón’ Norero.
Cabecillas criminales también recluidos

A esa cárcel también fueron llevados varios líderes de las principales bandas criminales del país, catalogadas como “terroristas” en el marco del “conflicto armado interno” declarado por el presidente Daniel Noboa en 2024.
Uno de ellos es Carlos Angulo (‘el Invisible’), cabecilla de Los Lobos y condenado como artífice del plan del atentado, donde fue asesinado el candidato presidencial Fernando Villavicencio; o Carlos Mantilla (‘Choclo’), cabecilla de Los Lagartos, y acusado de otro homicidio.
Asimismo está Fabricio Colón Pico, también cabecilla de Los Lobos, condenado por secuestro y por intimidación contra la fiscal general del país, Diana Salazar, quien lo señaló de presuntamente estar detrás de un plan para atentar contra ella.
Recientemente un juez envío a esa cárcel a tres hombres procesados por su presunta participación en un ataque armado registrado el pasado 17 de abril en una gallera de la provincia costera de Manabí, que dejó 12 muertos y al menos nueve heridos.
