Fede Valverde quiere «una pequeña revancha» y un cambio de actitud ante el Kairat

Los jugadores del Real Madrid se ejercitan en vísperas del partido de la UEFA Champions League que jugarán este martes Kairat Almaty y Real Madrid, en Almaty, Kazajistán. EFE/EPA/MAXIM SHIPENKOV

Almaty (Kazajistán), 29 sep (EFE).- El centrocampista del Real Madrid, Fede Valverde, aseguró hoy que quiere tomarse ante el Kairat en Liga de Campeones «una pequeña revancha», tras la abultada derrota sufrida ante el Atlético de Madrid.

Los jugadores del Real Madrid se ejercitan en vísperas del partido de la UEFA Champions League que jugarán este martes Kairat Almaty y Real Madrid, en Almaty, Kazajistán. EFE/EPA/MAXIM SHIPENKOV

«Queremos tomarnos una pequeña revancha para cambiar la dinámica del otro día e intentar ganar», dijo en rueda de prensa en el Estado Central de Almaty.

Los jugadores del Real Madrid se ejercitan en vísperas del partido de la UEFA Champions League que jugarán este martes Kairat Almaty y Real Madrid, en Almaty, Kazajistán. EFE/EPA/MAXIM SHIPENKOV

Valverde, quien destacó que «la actitud no se negocia», subrayó que el partido de mañana es la primera oportunidad para «cambiar la pisada».

«La derrota para nosotros fue obviamente un golpe muy duro», señaló, y admitió que los jugadores han hablado entre ellos para «salir más fuertes y concentrados».

El uruguayo insistió en la importancia de cambiar la imagen y aludió también a la goleada sufrida en las semifinales del Mundial de Clubes ante el PSG.

Además, reconoció que después de un Mundial de Clubes «muy bueno», ahora le está costando «mucho más» coger la forma.

«Estoy frustrado (…) Soy consciente de cómo estoy jugando. Soy el primero en saberlo», afirmó.

A su vez, ante la falta de laterales derechos en el equipo, afirmó: «No nací para jugar de lateral». Pero -según sus palabras- nunca se negó a jugar en esa posición.

En cuanto al multitudinario recibimiento anoche en la ciudad kazaja de Almaty, dijo que era un «orgullo» y, en cuanto al primer partido del equipo blanco en suelo asiático en la máxima competición continental, que era «un honor» jugar en Kazajistán.