Santiago de Chile, 2 oct (EFE).- La Fiscalía de Chile reiteró este jueves que existen «antecedentes claros» que vinculan a Diosdado Cabello, ministro del Interior de Venezuela y número dos del Gobierno de Nicolás Maduro, con el secuestro y asesinato del exmilitar venezolano Ronald Ojeda y advirtió que no descarta pedir su extradición si logra «robustecer un poco más» las pruebas en su contra.
Disidente del Gobierno de Nicolás Maduro y asilado político en Chile, Ojeda fue secuestrado el 21 de febrero de 2024 en su casa en Santiago y sus restos fueron hallados diez días después en una localidad periférica de la capital, sepultados debajo de un bloque de cemento.
«La verdad de la investigación es una y lo que podemos probar es otra, pero en este caso existen antecedentes claros que apuntan a Diosdado Cabello, pero requerimos un estándar superior para poder formalizar», señaló en una entrevista con el Canal 24 Horas el fiscal chileno Héctor Barros, encargado de la investigación.
Aunque admitió que «de acuerdo a la Constitución venezolana, la extradición no existe en su país», Barros insistió que «no tiene dudas» de que el homicidio del exmilitar venezolano «fue un crimen político».
La banda criminal trasnacional Tren de Aragua, nacida en la prisión venezolana de Tocorón, se ha extendido por Colombia, Perú, Bolivia y Chile, donde las autoridades la acusan de cometer numerosos delitos, como narcotráfico, extorsión, secuestros y homicidios.
La investigación por el asesinato del exteniente venezolano ha provocado un frontal enfrentamiento entre Chile y Venezuela, que apenas mantienen relaciones bilaterales.
El Gobierno del presidente Gabriel Boric avala la tesis del «móvil político» que la Fiscalía ha mantenido desde el principio y ya ha dicho que recurrirá a la Corte Penal Internacional (CPI) si se confirma la participación de Cabello.
De 32 años, Ojeda era miembro de un grupo de militares antichavistas autodenominado Movimiento por la Libertad y la Democracia y fue arrestado por las autoridades venezolanas en abril de 2017 junto con otros tres militares, pero logró escapar.
Según explicó Barros, Ojeda «participó en el intento golpista contra el Gobierno» de Nicolás Maduro en Venezuela.
El régimen venezolano publicó un decreto en el que degradó y expulsó sin juicio previo a 24 oficiales, entre ellos Ojeda. En 2023, el Gobierno chileno le concedió asilo político.
Dos meses antes de ser secuestrado y asesinado, añadió el fiscal chileno, «nuevamente había regresado a Venezuela con la finalidad de intentar otro golpe de Estado contra el Gobierno de Nicolás Maduro».
Hasta el momento han sido detenidos varios miembros de la facción ‘Los Piratas’, célula de la banda transnacional que estuvo a cargo del crimen.
La justicia decretó el miércoles por la noche prisión preventiva en el Recinto Especial Penitenciario de Alta Seguridad (Repas) para cinco integrantes de esta célula extraditados desde Estados Unidos, entre ellos Edgar Benítez Rubio, conocido como ‘El Fresa’, presuntamente uno de los principales implicados en el crimen de Ojeda, según Barros.
«Cumplía uno de los roles más relevantes en la estructura criminal puesto que es quien presta y guarda los vehículos que necesitaban para los secuestros los Piratas de Aragua, la célula que operó en este caso (de Ojeda)», dijo el persecutor.
Según él, hasta ahora, son 13 los imputados privados de libertad por la causa de Ronald Ojeda y 26 los detenidos por su participación en la organización criminal ‘Piratas de Aragua’.