La Paz, 29 sep (EFE).- La Fiscalía de Boliva anunció este lunes que evalúa solicitar una alerta internacional a la Interpol para encontrar a Luis Marcelo Arce Mosqueira, uno de los hijos del presidente de Bolivia, Luis Arce, quien tiene una orden de captura por un caso de violencia familiar.
El fiscal general, Róger Mariaca, dijo que el proceso penal continúa y que la orden de aprehensión sigue vigente aunque hace nueve días la Policía no logra detener a Arce Mosqueira, hijo mayor del mandatario.
«Estamos agotando todos los recursos para poder activar, si corresponde y ubicar a la persona si ya no estuviese en el país, lo que son los sellos, el azul, el rojo, como manda el procedimiento (ante la Interpol) para que se dé su aprehensión en otro país y sea extraditada para ser sometida a la justicia boliviana», afirmó Mariaca en una rueda de prensa desde Sucre, capital constitucional de Bolivia y sede del órgano judicial.
Mariaca aseguró que el Ministerio Público exige «constantemente» a la Policía que dé cumplimiento a la orden de captura, que se emitió el pasado 20 de septiembre.
La Fiscalía recibió la denuncia por el delito de violencia familiar que supuestamente ocurrió en la región oriental de Santa Cruz, y pudo «evidenciar no solo una violencia psicológica, sino una violencia física» contra la pareja de Arce Mosqueira.
El presidente Arce señaló hace una semana en un mensaje en sus redes sociales que «toda denuncia contra mis hijos, quienes son mayores de edad y plenamente responsables de sus actos, debe investigarse y esclarecerse ante las instancias que correspondan como con cualquier otro ciudadano».
También aclaró que su postura respecto a estos temas se da «más allá» de su condición de mandatario de Bolivia, sino «como padre que respeta las leyes» del país.
La denuncia contra el hijo mayor del presidente no es la única, ya que hay otras que afectan a la familia del jefe de Estado.
El diputado Héctor Arce, de la facción del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) vinculada al exmandatario Evo Morales (2006-2019), denunció que Rafael Ernesto Arce Mosqueira, hijo menor del presidente, compró varios bienes en La Paz por alrededor de 755.000 dólares, más de cinco millones de bolivianos.
Pero un primer caso contra Rafael Ernesto se conoció hace un par de meses, relacionada a la compra irregular de un terreno de más de 2.100 hectáreas por 3,3 millones de dólares (22 millones de bolivianos) en 2021, cuando tenía 25 años.
Después se supo que dicha transacción no fue la única, ya que Rafael Ernesto, junto a su hermana Camila Arce Mosqueira, de 20 años en ese entonces, accedieron a préstamos por 9,1 millones de dólares (62 millones de bolivianos), realizados en seis operaciones con una misma entidad bancaria en octubre de 2021.
Además, el hijo mayor del gobernante, Luis Marcelo, también fue señalado por supuestamente fungir como intermediario entre el Estado y las empresas que se disputaban proyectos de litio, sin ser funcionario público, con base en una grabación difundida por redes sociales.
La denuncia por este caso ingresó a la Fiscalía en octubre de 2023, pero en abril de 2024 fue rechazada al considerar que el audio no podía tomarse como prueba.
Recientemente, el mandatario boliviano también fue denunciado por abandono a una mujer embarazada, una exalta funcionaria estatal con la que presuntamente tuvo un hijo y que, según la denunciante, el jefe de Estado se negó a reconocer.