Fiscalía de Venezuela confirma detención de activista y la acusa de «incitación al odio»

La activista Martha Grajales habla en una manifestación el viernes 8 de agosto de 2025, en Caracas (Venezuela). EFE/ MIGUEL GUTIÉRREZ

Caracas, 11 ago (EFE).- La Fiscalía General de Venezuela confirmó este lunes la detención de la activista de derechos humanos Martha Grajales e indicó que será acusada de los delitos de «incitación al odio», «conspiración con Gobierno extranjero» y «asociación».

La integrante del colectivo SurGentes, Martha Lia Grajales, en una fotografía de archivo. EFE/ Miguel Gutiérrez

«Fue presentada e imputada la ciudadana Martha Lía Grajales en el lapso de ley tras haberse solicitado orden de aprehensión en su contra por acciones en contra de las instituciones venezolanas y la paz de la república», señaló la institución en Instagram.

El Ministerio Público (MP, Fiscalía) indicó que a Grajales se le dictó una medida de privativa de libertad «por el tribunal de la causa por los delitos de incitación al odio, conspiración con Gobierno extranjero y asociación», sin ofrecer mayores detalles de los supuestos hechos que habría cometido la activista.

Este lunes, comités de derechos humanos identificados con el chavismo exigieron la libertad de Grajales, quien fue detenida el viernes luego de participar en un acto a las afueras de la ONU, en Caracas, en apoyo a los familiares de presos políticos que fueron agredidos el martes cuando hacían una vigilia ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela.

Georgina Castillo, miembro del Comité de Derechos Humanos de la barriada de La Vega, en Caracas, pidió a las autoridades estudiar «bien» el caso de su «hermana» Grajales.

Más de 800 personas firmaron un documento para exigir la liberación de Grajales, según informó el domingo la ONG SurGentes, que asegura desconocer el paradero de su cofundadora desde su detención el pasado viernes.

Entre los firmantes, subrayó SurGentes, están organizaciones como las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora (Argentina) y el Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos (Ecuador).

Entretanto, el esposo de Grajales, Antonio González, informó que, junto al abogado Marino Alvarado, de la ONG venezolana Provea, visitó este domingo cinco centros policiales de reclusión en Caracas y en todos, aseguró, «han negado» la presencia de la activista.

En un video publicado por Provea en X, González alertó que la situación de Grajales «sigue siendo de desaparición», por lo que hizo un llamado a las autoridades a que informen sobre el paradero de su esposa y las razones de su detención, que le permitan comunicarse con sus familiares y nombrar a abogados de confianza.

Según Provea, tribunales penales de Venezuela se negaron a recibir el sábado un recurso de habeas corpus para conocer el paradero de la activista, quien fue detenida por presuntos funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana.