São Paulo, 25 ago (EFE).- La Fiscalía brasileña pidió a la Policía Federal que investigue la divulgación de noticias falsas en redes sociales con «potencial de causar una verdadera corrida bancaria», entre las que se encuentra un mensaje de Eduardo Bolsonaro, diputado e hijo del expresidente Jair Bolsonaro, y otros influenciadores de derecha.
A través de una nota divulgada este lunes, la entidad informó que el pedido de investigación se da a partir de una denuncia efectuada el pasado viernes por el Banco do Brasil, que manifestó su preocupación ante «la divulgación de informaciones falsas que incentivan un quiebre de la normalidad institucional».
Este mes, diversos perfiles comenzaron a divulgar noticias falsas involucrando a varios agentes del sistema financiero brasileño, como respuesta al «posicionamiento institucional» de algunos bancos relacionados a «las sanciones impuestas» por Estados Unidos, entre las que se encuentra la aplicación de la ley Magnitsky sobre el juez instructor del proceso por golpismo contra Bolsonaro, Alexandre de Moraes.
De acuerdo con la Fiscalía, estos mensajes publicados en redes sociales, mayoritariamente por los seguidores del expresidente Jair Bolsonaro, forman parte de una «acción coordinada» que busca «generar caos» y «aterrorizar a la sociedad con la perspectiva inminente de un colapso del sistema».
Entre los perfiles a investigar se encuentra el del diputado Eduardo Bolsonaro, quien hace aproximadamente seis meses se encuentra en Estados Unidos negociando sanciones contra Brasil para beneficiar a su padre en el proceso por golpismo que enfrenta en la Corte Suprema.
Según la denuncia, Eduardo Bolsonaro afirmó en su canal de YouTube el pasado 20 de agosto que el banco estatal que presenta la denuncia «será eliminado de las relaciones internacionales, lo que lo llevará a la quiebra».
Otro diputado, señalado en el informe enviado a la Policía, es Gustavo Gayer, del Partido Liberal, quien publicó un mensaje en el que incitaba a sus seguidores a retirar el dinero de sus cuentas bancarias brasileñas.
En este sentido, la Fiscalía solicitó la apertura de una investigación policial con el fin de determinar la materialidad y autoría de estos hechos que, de acuerdo con el comunicado, además «pueden tener correlación con investigaciones penales en curso en el ámbito de la competencia originaria de la Corte Suprema».
La semana pasada, la Policía Federal acusó al exmandatario y a su hijo de cometer «delitos de coacción» y «tentativa de abolición del Estado democrático de derecho», tras concluir la investigación sobre las presuntas maniobras de ambos para entorpecer el juicio por golpismo, en complicidad con el Gobierno de Estados Unidos.
El diputado ha alardeado en diversas declaraciones públicas de haber presionado a Washington para que imponga sanciones contra autoridades brasileñas, con el objetivo de recabar apoyo para su padre.
En este sentido, Trump ha impuesto un arancel del 50 % adicional sobre parte de las importaciones brasileñas en represalia por la supuesta persecución política y judicial que sufre Jair Bolsonaro.
También ha revocado el visado de varias autoridades políticas y judiciales con el fin de presionar para que el juicio que enfrenta el líder de la extrema derecha en el Supremo brasileño «acabe inmediatamente».
Sin embargo, el juicio en el que Bolsonaro enfrenta una posible pena de 40 años de prisión empezará el próximo 2 de septiembre.