Francia y Bolivia crean puentes en la edición bicentenario de la Feria del Libro de La Paz

Una persona camina frente al puesto de exhibición de Francia en la Feria Internacional del Libro de La Paz (FIL) este miércoles, en La Paz (Bolivia). EFE/ Gabriel Márquez

La Paz, 30 jul (EFE).- La Feria Internacional del Libro de La Paz (FIL), uno de los principales eventos culturales de Bolivia, abrió sus puertas este miércoles con el mensaje principal de «tender puentes» entre Francia, el invitado de honor, y Bolivia, que celebra 200 años de independencia.

Una persona recorre la Feria Internacional del Libro de La Paz (FIL) este miércoles, en La Paz (Bolivia). EFE/ Gabriel Márquez

«Es el año del bicentenario, hemos puesto muchísimo trabajo y esfuerzo en lograr una programación en la que el libro boliviano sea el protagonista, pero no por eso hemos descuidado los autores internacionales», dijo a EFE el presidente de la Cámara Departamental del Libro de La Paz, (CDLLP), Fernando Barrientos.

Una mujer aimara participa en la Feria Internacional del Libro de La Paz (FIL) este miércoles, en La Paz (Bolivia).. EFE/ Gabriel Márquez

Barrientos espera recibir más de 120.000 asistentes en los 12 días de la muestra, que estará abierta del 30 de julio al 10 de agosto. La vigésima novena edición de la feria tendrá más de 555 actividades culturales.

«Queremos que nuestra feria sea un espacio de reencuentro, de esparcimiento, de fomento a la lectura», señaló Barrientos.

El mensaje principal de esta edición es «tender puentes» literarios y culturales entre Francia y Bolivia, tomando en cuenta que el país anfitrión de la feria celebra el bicentenario de su independencia.

«Queremos crear puentes entre Bolivia y Francia, porque Francia fue uno de los primeros países en reconocer la independencia de Bolivia y ser el país invitado de honor marca todavía más las relaciones que tenemos», indicó la encargada del Servicio de Cooperación y Acción Cultural de la embajada de Francia en Bolivia, Oriana Amiel Soler.

Manifestó que la feria del libro es una celebración para afianzar la «amistad» y el «apoyo de la diversidad cultural» entre ambos países y esa intención se traducirá en actividades como la lectura de la novela clásica ‘El Principito’ en lenguas originarias de Bolivia, entre otras.

La institución invitada de honor para este año es Naciones Unidas que organiza diversas actividades con el lema ’80 años de la ONU en el Bicentenario de Bolivia’.

Una de las principales novedades de esta edición de la feria del libro la tiene la librería Emanuel que promueve «La cita a ciegas con un libro», en esta los visitantes escogerán un libro a partir de una sola frase que estará grabada en el empaque con la intención de que al abrir la envoltura se sorprenda con el libro elegido, explicó la encargada Silvana Quino.

Una de las características de la edición de este año, es que la feria habilitó un espacio exclusivo que es interactivo para niños con 135 presentaciones artísticas, cuenta cuentos, títeres, talleres y actividades lúdicas.

A esa programación se suman ocho programas especiales que conectarán la literatura con el cine, la gastronomía, la ciencia, el fútbol, la moda, la cultura fandom y otros.

El presidente de la CDLLP añadió que hay más de 200 expositores que participarán en la feria.

Entre estos hay editoriales, librerías, ONG, instituciones públicas y privadas, embajadas, universidades y autores independientes, con una oferta literaria que va desde las novelas, investigaciones y poemarios, hasta cómics internacionales y creados en Bolivia.

En la lista de invitados de honor de Francia resalta el autor y cineasta Philippe Claudel, la escritora especialista en literatura boliviana Alaïs Le Villain, el reconocido escritor y cineasta Oscar Vela Descalzo, el ilustrador y dibujante de cómics Olivier Deloye, y la historiadora Françoise Martínez.

Entre otros invitados internacionales están el suizo Stefan Gurtner, quien escribió una obra que repasa una etapa en la que tuvo contacto cercano con Bolivia, la escritora y antropóloga peruana Karina Pacheco, el dibujante chileno Pedro Prado, y la periodista y escritora brasileña Manuela D’avila.