Light
Dark
 

Gómez del Pilar corta única oreja en interesante corrida Concurso de ganaderías en Madrid

MADRID, 28/09/2025.- El diestro Gómez del Pilar corta una oreja a uno de sus toros durante la corrida ´Concurso de ganaderías´ que se celebra hoy domingo en la plaza de toros de Las Ventas, en Madrid. EFE / Victor Lerena.

Madrid, 28 sep (EFE).- Cuatro de los ejemplares lidiados en la corrida concurso de Las Ventas ofrecieron opciones de triunfo en mayor o menor medida, aunque solo Gómez del Pilar logró pasear un trofeo, en la tarde de la discreta confirmación de Rubén Sanz y la disposición sin brillo de Javier Herrero.

El ejemplar de Partido de Resina, de nombre Excitado, número 21, y de 546 kilos, resultó declarado ganador del concurso de ganaderías.

CRÓNICA: La tarde se la llevó Gómez del Pilar, aunque con matices, ya que, con el mejor lote, la oreja cortada en el sexto supo a poco. Y entramos en detalles.

El picador Juan Manuel Sangüesa anduvo certero picando al tercero, de Partido de Resina, ganador del concurso, que más tarde desarrolló clase y codicia en la muleta de un Gómez del Pilar que ejecutó, sin continuidad ni rotundidad, algunos naturales largos y templados, mezclados con otros de trazo más grueso por ambos lados, sin acoplarse en plenitud a unas embestidas que llevaban prendidas un triunfo que el toledano no supo amarrar, quedando por debajo del toro, que tuvo muerte de bravo.

El resultado, el de Partido de Resina recibió la ovación correspondiente en el arrastre mientras su matador dio la vuelta al ruedo tras no ser atendida la petición de oreja.

Del Pilar intentó lucir al sexto en el primer tercio, pero el de Rehuelga no pasó de cumplidor. Después de una buena lidia de Raúl Palancar en banderillas, el burel se dejó mucho en la muleta por los dos pitones.

El toledano levantó los olés de los tendidos en tres tandas postreras de naturales, en una faena dilatada y avisada. Antes primaron los tiempos muertos y un acople discontinuo, con voltereta incluida.

El acertado uso de la espada empujó para que, esta vez sí, el pañuelo blanco asomara en el palco y se puntuara en una tarde con más opciones de las materializadas.

La historia de Rubén Sanz tiene miga. Con 47 años, peinando abundantes canas y no menos vicisitudes taurinas, logró hoy su sueño de confirmar alternativa en Madrid, aunque fuera sin apenas haber visto un pitón en los últimos años.

Sin embargo, como contrapeso a tal inconveniente, tampoco perdió el impulso vital (y artístico) gracias al cual, finalmente, se vio haciendo el paseíllo en la única plaza que, menos que más, te puede cambiar la vida. Sin embargo, después de tan larga espera, el sueño del soriano se saldó con discreción.

El primero repitió en la muleta lo que antes hizo durante la lidia: echar la cara arriba cuando se topó con algún obstáculo, fuera este tela, peto o tablas de burladero, con intento de salto al callejón frustrado incluido.

Con este material el confirmante Rubén Sanz compuso la figura en la tanda inicial por el pitón derecho, llevando a media altura la también media arrancada del de Concha y Sierra, sin poder evitar el derrote final del toro, que tropezó franela con frecuencia.

Sin que aquello tomara altura, Sanz fue a por la espada después de haberlo intentado voluntariosamente. Por su parte el cuarto, de Murteira Grave, se defendió punteando y sin pasar, y Sanz nada pudo hacer, si bien en su quehacer se hizo evidente su corto oficio y falta de seguridad. Que hubiera sido de manera distinta habría sido cercano al milagro, y tal no se produjo.

El segundo, de Palha, dejó a Javier Herrero lucirse a la verónica para, a continuación, lucirse el burel portugués empujando en el peto de Carlos Prieto, donde se entretuvo un buen rato.

Al segundo encuentro con las plazas montadas el tal Saltillo (así se llamaba el toro) se arrancó de largo, pero esta vez Prieto marró, emborronando un encuentro emocionante, y enfadando a parte de los tendidos.

De nuevo se dilató la pelea en el caballo, acabando con la pujanza del de Palha, que en la muleta de Herrero quiso pero no pudo, imposibilitando las opciones de triunfo de torero segoviano, que fue pitado mientras su antagonista recibió una fuerte ovación en el arrastre.

De nuevo Herrero hilvanó varias verónicas reseñables en el quinto, de José Escolar, algo protestado por falta de remate. El de Escolar cumplió en el caballo, y en el último tercio embistió humillando y colocando la cara, exigiendo sutileza en los toques y llevarlo muy tapado, extremos que ocurrieron muy de vez en cuando en la labor de un Herrero dispuesto pero sin el oficio necesario para toros de esta exigencia técnica.

FICHA: Plaza de toros de Las Ventas de Madrid. Corrida de toros concurso de ganaderías. 9.163 espectadores.

Se lidiaron toros de Concha y Sierra (primero), Palha (segundo), Partido de Resina (tercero), Murteira Grave (cuarto), José Escolar (quinto) y Rehuelga (sexto), bien presentados. Primero sin clase ni humillación. El segundo resultó bravo y con clase, aunque venido abajo tras las dos entradas al caballo, siendo ovacionado con fuerza en el arrastre. Bueno el tercero. Sin fondo el cuarto. Encastado y con entrega el quinto, aplaudido en el arrastre. Manejable el sexto.

Rubén Sanz, que confirmaba alternativa (de blanco y oro): pinchazo, pinchazo hondo y casi media desprendida (palmas); pinchazo, pinchazo hondo y descabello (silencio).

Javier Herrero (de blanco y oro con remates en negro): estocada entera caída (pitos); pinchazo y casi entera desprendida (silencio tras aviso).

Gómez del Pilar (de verde hoja y oro): estocada entera arriba (vuelta tras aviso); estocada entera desprendida (oreja tras aviso).

Rubén Sanz confirmó alternativa con el toro Mañiquito, de Concha y Sierra, número 28, de 515 kilos.

Julio César Sánchez