Viena, 28 may (EFE).- El director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, considera que el sector nuclear en España “es muy bueno”, respeta “la decisión democrática” de seguir el calendario de cierre de las centrales, pero advierte de que se trata de “una excepción” en un escenario con un interés creciente por la energía nuclear.
“Lo que vemos es un cambio muy grande y, con la excepción de España y Alemania, la mayoría de los países que decidieron cerrar han cambiado de opinión. Uno tras otro: Bélgica, Países Bajos, Suiza, Japón…”, ha señalado.
“Todos los que decían ‘nucleares no’ intentan volver. Como Italia. Veremos si lo hace”, ha añadido Grossi en Viena, durante un encuentro con un grupo de medios de comunicación.
“Respeto las decisiones democráticas”, ha insistido el diplomático argentino, que subraya que el OIEA “no es un lobby ni tiene interés” en que los países se sumen o abandonen la energía nuclear.
“Pero la resistencia a las nucleares a veces se ha debido a una idea falsa. Lo que hacemos es dar información”, ha añadido.
El OIEA celebra esta semana una conferencia internacional en su sede de Viena durante la que ha expuesto “el creciente interés” por la energía nuclear y ha presentado una lista de 37 países que considera “nuevas incorporaciones”: 23 de ellos se encuentran en una fase de deliberación para la toma de decisiones y otros 14 ya han comenzado la construcción de instalaciones nucleares o han suscrito contratos para hacerlo.
España tiene tres centrales nucleares cerradas y cinco operativas con siete reactores. El calendario aprobado contempla el cierre de todas ellas entre 2027 y 2035.
“Sería por mi parte inapropiado criticarlo”, ha dicho Grossi. “Pero al mismo tiempo vemos lo que sucede en el mundo y el mundo parece ir en otra dirección”.
Esto no quiere decir, ha precisado, que la postura de España “sea una mala decisión”.
“El sector nuclear español es bueno, pero los españoles son los que tienen que decidir”, ha indicado. “Lo seguimos, respetamos las decisiones, pero tenemos la visión de que la energía nuclear tiene un papel que jugar”.
Grossi ha recordado que, durante la sesión del martes de la conferencia, más de 80 alcaldes de todo el planeta expusieron su experiencia al frente de municipios con centrales nucleares.
“Están felices. No han crecido, ni tienen tres ojos… Había que darles una voz. También tienen problemas, pero aprendí mucho de ellos porque las comunidades locales tienen una perspectiva diferente”, ha dicho.
Entre esos alcaldes estuvieron los agrupados en la Asociación de Municipios en Áreas de Centrales Nucleares y Almacenamiento de Residuos Nucleares (AMAC) en España, en cuyo nombre habló Juan Pedro Sánchez Yebra, alcalde de Yebra (Guadalajara).
Voluntad de acuerdo en las negociaciones con Irán
Grossi, al frente del OIEA desde 2019 y que ha confirmado su intención “seria” de optar al puesto de secretario general de Naciones Unidas cuando concluya el mandato de António Guterres en 2026, también se ha referido a las negociaciones entre Estados Unidos e Irán sobre el programa nuclear iraní y ha destacado que “lo importante es que el proceso continúa, lo que es indicativo de que hay voluntad de llegar a un acuerdo”.
También se ha mostrado “preocupado” por la situación de la central nuclear de Zaporiyia, en Ucrania, la mayor de Europa, en donde “las operaciones militares se siguen produciendo a una relativa cercanía”.
“En los próximos días viajaré a Kiev y quizá a Rusia”, ha anunciado.
Respecto al Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares (TNP), ha admitido que le inquieta su vigencia porque “países que hasta ahora lo observaban, que lo sostenían firmemente, se lo cuestionan”.
“Hay ese riesgo”, ha admitido. “Nos podemos imaginar el mundo si los países con armas nucleares fueran 20 o 25. Por eso, este es un momento de enormes consecuencias para todos”.
Grossi se ha mostrado comprensivo con las voces críticas con las organizaciones internacionales, a la vista de los actuales conflictos, y ha pedido que “se reconecten con lo que pasa fuera”.
“Y, sin embargo, somos útiles”, ha destacado sobre los organismos multilaterales.