Santiago de Chile, 12 ago (EFE).- Gustavo Gatica, una de las víctimas más emblemáticas del estallido social de 2019 en Chile, declaró este martes por primera vez en el juicio en contra del expolicía Claudio Crespo, acusado de dispararle y dejarlo ciego durante las masivas marchas.
«Me uní a este grupo de manifestantes. Primero, gritando cosas y luego recuerdo que tomé una piedra y la lancé para adelante», declaró el joven en la audiencia.
El relato de Gatica es considerado clave en la investigación de la Fiscalía, que busca esclarecer lo ocurrido el 8 de noviembre de 2019, día en el que el joven recibió el impacto de varios perdigones en su rostro y perdió completamente la vista en los alrededores de Plaza Italia, epicentro de la mayor ola de protestas desde el fin de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
La Fiscalía chilena señala a Crespo como autor de los disparos contra Gatica, que entonces tenía 21 años, y pide 12 años de cárcel para el excarabinero.
«Había retrocedido a tomar una piedra, la tenía en mis manos, y al acercarme hacia adelante, en esa rotación, siento el impacto y de inmediato perdí la visión completamente», señaló -según recoge la prensa local- sobre el momento exacto en el que recibió el impacto en su rostro.
Según explicó Gatica, en ese momento sintió un dolor «muy agudo» en la cara que se intensificó con el paso de los minutos y fue llevado a la Clínica Santa María, donde se pusieron en contacto con su familia.
«Tengo el recuerdo de estar en estado de shock, preguntándome a mí mismo por qué no podía ver», aseguró Gatica, que hoy está negociando un cupo como diputado en la lista oficialista para las elecciones legislativas de noviembre.
Uno de los argumentos centrales del interrogatorio de la defensa fue que el actuar policial estaba justificado, alegando que el reconocimiento de Gatica de haber lanzado una piedra era «importante».
«Resulta trascendente para establecer que, efectivamente, en el momento en que se utilizaron las armas existía un riesgo para su integridad física», alegó el abogado del acusado a la salida de la sesión.
En total, se calcula que más de 200 testigos, entre ellos varios altos mandos policiales de entonces, declararán en el juicio contra Crespo, que comenzó en noviembre de 2024 y se alargará durante los próximos meses.
El estallido social, que se extendió desde el 18 de octubre de 2019 hasta la irrupción de la pandemia, combinó marchas pacíficas y multitudinarias con episodios de violencia, quema de estaciones de metro y saqueos.
La ONU y distintos organismos internacionales señalaron a las fuerzas de seguridad por violaciones a los derechos humanos. De los 10.142 casos que se abrieron por violencia policial, solo el 0,42 % de las investigaciones concluyeron, según Amnistía Internacional.