Head: en cabeza gracias a Lara Gut

La esquiadora suiza Lara Gut en el podio. EFE/EPA/ALESSANDRO DELLA VALLE

Adrian R. Huber

Madrid, 7 mar (EFE).- A falta de apenas 18 pruebas para completar las 74 programadas esta temporada, la Copa del Mundo de esquí alpino afronta su tramo final este mes de marzo con el suizo Marco Odermatt apuntando claramente a un cuarto gran Globo de Cristal (seguido) y con su compatriota Lara Gut-Behrami discutiéndole el título a la italiana Federica Brignone.

Pero hay otra clasificación, menos conocida: la de las marcas de los esquís con los que todos los deportistas luchan por la gloria. Y esa clasificación está encabezada, de momento, por Head. Empresa austriaca fundada en Estados Unidos en 1950, también vinculada al tenis y al pádel.

Con sede en Kennelbach, en Vorarlberg -la provincia más occidental de Austria-, surge de la fusión de la empresa matriz de Baltimore (Maryland) con la austriaca Tyrolia -fabricante austriaco de material de esquí- y la italiana Mares, dedicada al buceo.

Con una de sus entonces innovadoras raquetas de aluminio -en lugar de las tradicionales, de madera- el estadounidense Arthur Ashe ganó Wimbledon en 1975; y entre otros ilustres que la usan destaca el serbio Novak Djokovic, el tenista más laureado de todos los tiempos.

Su primer contacto con el mundo del esquí se produjo en 1969. Contrató al francés Jean-Claude Killy -que un año antes había triunfado ante su afición en los Juegos Olímpicos de Grenoble, en los que firmó un pleno al ganar oro en las tres disciplinas existentes: descenso, gigante y eslalon- y comenzó a desarrollar el ‘Killy 800’, en nuevo esquí de fibra de vidrio que empezaría a ‘enterrar’ las tablas de madera.

Hoy en día, la que triunfa con unos Head es Lara Gut, con 33 años, la gran dama del esquí suizo, que entre sus patrocinadores también cuenta a Rolex, la lujosa marca de relojes de su país. Lara lo ha ganado absolutamente todo en el deporte rey invernal. Y, a falta de las nueve carreras que faltan para que Sun Valley (Idaho, EEUU) cierre la competición de la regularidad, aún está a tiempo de revalidar título y capturar su tercera gran Bola de Cristal.

Eso, si le remonta 251 puntos a Brignone, un año mayor que ella y que avanza con paso firme hacia su segunda victoria final.

Gut, campeona olímpica, doble oro mundial y con doce medallas en grandes eventos, contribuye con sus buenos resultados a que Head lidere la clasificación de marcas, avalada por la Federación Internacional de Esquí (FIS) y para la que puntúan los seis primeros de cada prueba -femenina y masculina- de la Copa del Mundo.

Head (para la que también suman el suizo Franjo Von Allmen, flamante campeón mundial de descenso; su compatriota Camille Rast, oro en eslalon en los recientes campeonatos de Saalbach (Austria) y la sueca Sara Hector, campeona olímpica de gigante) comanda con 6.450 puntos, 1.330 más que la marca francesa Rossignol; para la que esquían Brignone -líder de la Copa del Mundo con 1.194 unidades, 251 más que Gut- y otro helvético, Loic Meillard, el gran triunfador de los pasados Mundiales: en los que ganó dos oros y un bronce.

Meillard es tercero en la general, que lidera su compatriota Odermatt con 1.306 puntos, 360 más que el noruego Henrik Kristoffersen.

‘Odi’, de 27 años, el gran dominador de los últimos cursos, añade orgullo patrio al lograr todas sus gestas sobre sus helvéticos esquís Stoeckli, que ocupan el cuarto lugar de la clasificación de constructores, con 1.800 puntos. Exactamente 1.705 menos que Atomic, tercera gracias a los resultados de la italiana Sofia Goggia -oro y plata olímpica en descenso-, que ocupa esa plaza en la general de la Copa del Mundo; y del brasileño Lucas Pinheiro, séptimo en la clasificación de hombres.

Con Atomic triunfa desde hace años Mikaela Shiffrin (de 29), la mejor esquiadora de todos los tiempos, que también invita a sus seguidores a consumir Barilla, conocida pasta italiana. A pesar de haber ganado su octavo título mundial el mes pasado en Saalbach, la estadounidense no cuenta ya para la general -que ha ganado en cinco ocasiones-, ya que estuvo ausente, por lesión, durante dos meses.

‘Mika’ es decimoséptima en la general, pero contribuyó a la causa con sus tres victorias de esta campaña. Con la última de ellas, hace dos fines de semana, en Sestriere (Italia), elevó a 100 su propio récord histórico absoluto (femenino y masculino) en la Copa del Mundo. Competición que se reanuda este fin de semana en Kvitfjell (Noruega), donde compiten los hombres; y en Are (Suecia), donde lo harán las mujeres.

El austriaco Marcel Hirscher posee otra plusmarca absoluta, con ocho triunfos finales (seguidos) en la competición de la regularidad. Retirado hace seis años, antes de regresar este curso -como holandés, el país de su madre- y volver a dejarlo al romperse el ligamento cruzado de la rodilla izquierda, el astro salzburgués se recicló en exitoso empresario, creando su propia marca de esquís: Van Deer. Un proyecto compartido con Red Bull.

Kristoffersen, que con su doblete del pasado fin de semana en Kranjska Gora (Eslovenia) elevó a 33 su número de victorias en la Copa del Mundo y que en su día fue uno de los pocos que le podían seguir el ritmo, es el principal reclamo de la marca de Hirscher. Otro noruego, Timon Haugan, cuarto en la general, también esquía con Van Deer; que en apenas un par de años ya se ha establecido entre las punteras y esta temporada es quinta, con 1.330 puntos.

La austriaca Fischer es sexta, con 940; 135 más que la francesa Salomon. La también gala Dynastar (440) y la austriaca Blizzard (290) ocupan la octava y la novena plaza de una clasificación en la que la italiana Nordica (155) y la austriaca Kaestle -fundada hace 101 años y con 140 puntos- son décima y undécima, respectivamente.