Hijo de Bolsonaro se reúne con secretario de EEUU que le canceló cita a ministro brasileño

Fotografía tomada de la cuenta oficial de la red social X @BolsonaroSP del diputado brasileño Eduardo Bolsonaro (d), hijo del expresidente Jair Bolsonaro, posando con el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent (c), este miércoles, en Washington (EE.UU.). EFE/ @BolsonaroSP /

Río de Janeiro, 15 ago (EFE).- El diputado brasileño Eduardo Bolsonaro, hijo del expresidente Jair Bolsonaro, quien enfrenta un juicio por golpismo, se reunió con el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, el miércoles, el mismo día en que el funcionario canceló una cita virtual con su homólogo de Brasil.

La reunión fue destacada en una fotografía divulgada este viernes por el parlamentario en las redes sociales.

«En la reunión del 13 de agosto tuvimos una excelente conversación con el secretario del Tesoro, Scott Bessent. Fue una oportunidad única poder hablar sobre Brasil y Estados Unidos con alguien tan bien preparado», dijo el diputado en un mensaje en el que también agradeció «la receptividad» y «la disposición» del miembro de la Casa Blanca.

Bessent recibió a Eduardo Bolsonaro la fecha en que tenía previsto reunirse virtualmente con el ministro de Hacienda de Brasil, Fernando Haddad, para discutir el tema del arancel adicional del 50 % impuesto por Estados Unidos a las importaciones brasileñas.

Esta reunión fue cancelada por el secretario estadounidense por supuestos problemas de agenda y no fue reprogramada, según dijo Haddad.

En una entrevista al canal Globonews, el ministro brasileño señaló que la conversación fue cancelada por la articulación de «las fuerzas de extrema derecha» y señaló directamente a Eduardo Bolsonaro como artífice del asunto, aunque este lo negó.

El diputado está en EE.UU. desde marzo presionando para que Washington aplique sanciones contra autoridades de Brasil y recabando apoyo para su padre, quien enfrenta un juicio en la Corte Suprema por golpismo.

El arancel del 50 % adicional, que entró en vigencia la semana pasada, fue impuesto por el Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, en represalia por la supuesta «cacería de brujas» que sufre el exmandatario.

El gravamen afecta al 36 % de las exportaciones brasileñas, incluyendo carnes y café, dos de los principales productos que Brasil envía al mayor mercado mundial.