San Salvador, 9 jun (EFE).- La directora para las Américas de la organización Human Rights Watch (HRW), Juanita Goebertus, cuestionó este lunes la falta de una reacción «firme» por parte de la comunidad internacional ante la «arremetida» que vive El Salvador contra activistas de derechos humanos.
Esto se dio en reacción a la detención del reconocido abogado constitucionalista salvadoreño Enrique Anaya, crítico del Gobierno del presidente Nayib Bukele y acusado por la Fiscalía General de lavado de dinero.
«Seguimos con preocupación la detención del reconocido abogado Enrique Anaya, crítico de Bukele. Ocurre durante una arremetida contra defensores de derechos humanos y periodistas», sostuvo Goebertus en X.
Añadió: ¿Cuánto más va a esperar la comunidad internacional para reaccionar de forma firme?
El abogado Anaya fue detenido el sábado por la Policía salvadoreña bajo el cargo de lavado de dinero, según informó la Fiscalía escuetamente.
«Este día, se ha ejecutado la captura de Salvador Enrique Anaya Barraza, por el delito de Lavado de Dinero y Activos. Será remitido a los tribunales correspondientes en los próximos días», publicó la Fiscalía en X.
Anaya es un fuerte crítico del Ejecutivo del presidente Bukele, enfocado principalmente en aspectos jurídicos y que en las últimas semanas ha denunciado desde redes sociales las que considera irregularidades en el proceso penal que enfrenta la abogada anticorrupción Ruth López, detenida el pasado 18 de mayo y procesada por enriquecimiento ilícito.
«Cada vez más cuestionada y confrontada la dictadura bukeleana en el plano internacional: ahora es la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)», dice la última publicación de Anaya en X.
Esto fue en referencia a un comunicado de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) publicado el viernes, en el que el organismo, que forma parte de la Organización de los Estados Americanos (OEA), manifestó su preocupación por las «detenciones recientes contra personas defensoras de derechos humanos».
La CIDH hizo referencia a las detenciones de la abogada anticorrupción Ruth López, el abogado ambientalista Alejandro Henríquez, el pastor evangélico y líder comunitario José Ángel Pérez, y el portavoz de una organización humanitaria Fidel Zavala.
También la Unión Europea (UE) ha expresado preocupación por la detención de defensores de derechos humanos en el país centroamericano.
El mandatario salvadoreño calificó a la UE de ser «un bloque envejecido, sobreregulado, dependiente de la energía, rezagado tecnológicamente y liderado por burócratas no electos», que da «sermones al resto del mundo».