Río de Janeiro, 17 jun (EFE).- Unos cien manifestantes, entre indígenas, ecologistas y sindicalistas, protestaron este martes contra la subasta promovida por Brasil para ofrecer concesiones con el fin de explorar y explotar áreas en una vulnerable región marina próxima a la desembocadura del Amazonas.

Los manifestantes se concentraron desde temprano frente al hotel en que la Agencia Nacional de Petróleo (ANP, regulador) subastó derechos sobre 172 áreas en cinco cuencas sedimentarias, incluyendo 47 ubicadas próximas a la boca del Amazonas.

Los manifestantes alegan que, además de contradecir las propuestas de descarbonización impulsadas por Brasil como organizador de la Cumbre Climática COP30, prevista para noviembre próximo en la ciudad amazónica de Belém, la subasta pone en riesgo una sensible región en las costas del Atlántico con ecosistema amazónico.
Según los manifestantes, la exploración de petróleo en la región es una grave amenaza por el impacto que un posible derrame podría tener en la zona, considerada de «extrema sensibilidad socioambiental», pues alberga pueblos indígenas y una rica fauna y flora, con manglares, arrecifes de coral y especies en peligro, como el delfín gris y el manatí.
Ante tal riesgo, la petrolera estatal Petrobras aún no ha conseguido la licencia ambiental necesaria para realizar su primera perforación en una concesión que se adjudicó en esta misma región hace doce años.
El líder indígena Yaipu Tapayuna, de la etnia Tapayuna, afirmó a EFE que cualquier operación petrolera en la Amazonía no solo amenaza la mayor selva tropical del mundo sino la vida y la cultura de los pueblos originarios de la ocupan.
Para Leandro Landefri, vocero del Sindicato de los Petroleros en Río de Janeiro, Brasil no necesita extender la exploración a regiones sensibles para seguir produciendo petróleo ya que aún cuenta con ricas reservas en operación.
Según la ANP, doce empresas, incluyendo grandes multinacionales, están habilitadas para pujar en la subasta, pero otras 31 compañías también se inscribieron y pueden participar en consorcios liderados por las autorizadas.
Las áreas ofrecidas están distribuidas en una cuenca sedimentar terrestre (Perecis) y en cuatro marinas: Potiguar, Santos, Pelota Ríos y Foz do Amazonas.