Informe advierte que el costo de producción industrial argentino subió un 25 % en dólares

Fotografía de archivo en donde se ve a una mujer que trabaja en una fábrica de balones en Buenos Aires (Argentina). EFE/ Juan Ignacio Roncoroni

Buenos Aires, 13 jul (EFE).- El costo de producción en Argentina se incrementó un 25 % en dólares desde diciembre de 2023, según un informe de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE), elaborado por el economista Fausto Spotorno, quien es exasesor del presidente Javier Milei.

“El costo de producción en Argentina se incrementó un 25 % en dólares desde diciembre de 2023, mientras que el IPP (Índice de Precios al Productor) estadounidense mostró una variación cercana al 4 %”, señaló el documento difundido este domingo en los medios locales.

Para Spotorno, esa diferencia “revela que el encarecimiento de los costos locales se explica principalmente por factores domésticos como la apreciación real del tipo de cambio” o el precio de la energía.

El estudio advirtió que, pese a cierta estabilidad cambiaria, la industria pierde competitividad por factores internos, e indicó que “la mejora en las condiciones financieras todavía no logra compensar el impacto de la inflación, la recomposición salarial y el encarecimiento de insumos clave”.

Los aumentos -afirmó el informe- “afectan negativamente la rentabilidad, dificultan la planificación a largo plazo y limitan la capacidad de inversión y expansión de las empresas”.

Sectores como la metalurgia, plásticos y minerales no metálicos registraron aumentos superiores al 12 % en dólares, mientras que ramas con mayor perfil exportador, como maquinaria y muebles, tuvieron subas de más del 23 %.

La Unión Industrial Argentina (UIA) y Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA) calificaron la situación como “insostenible” y alertaron que, aunque la suba del dólar genera tensión, sin políticas activas para reducir los costos operativos la industria no logra recuperarse.

Las pymes industriales advirtieron que la combinación de altos costos de insumos, presión impositiva y escaso acceso al crédito frena la inversión y amenaza el empleo.

Spotorno señaló, en tanto, que “es imprescindible avanzar hacia una competitividad estructural” con reformas impositivas, mejoras en infraestructura e incentivos a la innovación e indicó que “con la estabilización sola no alcanza”.