Naciones Unidas, 26 sep (EFE).- El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Abás Araqchí, afirmó este viernes ante el Consejo de Seguridad de la ONU que el fracaso de una resolución que pedía una prórroga a una serie de sanciones contra su país «marca un precedente peligroso».
«Si los acuerdos pueden romperse a voluntad, ninguna nación podrá confiar en los compromisos internacionales, y si se imponen medidas ilegales, el Consejo corre el riesgo de perder credibilidad y autoridad», apuntó Araqchí.
Para el iraní, esto no solo perjudicaría a Irán, sino al sistema del derecho internacional y la seguridad colectiva.
Las sanciones a Irán por su falta de cooperación con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) entran en vigor mañana sábado después de que el Consejo de Seguridad rechazara hoy una resolución presentada por Rusia y China para dar una prórroga de seis meses a Teherán.
El Consejo tumbó la resolución por cuatro votos a favor y nueve en contra, más dos abstenciones, con lo que no reunió los nueve votos necesarios para ser aprobada.
Las sanciones (conocidas como ‘snapback’) han sido promovidas por tres países de Europa (Francia, Alemania y Reino Unido, o grupo E3) que consideran que Teherán no ha cumplido con los compromisos de limitar su programa nuclear adquiridos en el acuerdo alcanzado en 2015, que limitaba el programa iraní y que fue abandonado por Estados Unidos en 2018, mientras que Irán ha repetido que el E3 no ha cumplido con su parte del trato.
El ministro iraní aseguró que tanto los países del E3 como Estados Unidos han «tergiversado sistemáticamente» el programa nuclear «pacífico» iraní.
Al hacerlo, han ido erosionando las acusaciones «infundadas» de Israel, que «como régimen genocida ocupante es el único que posee armas nucleares en nuestra región», incidió.
Según el ministro, su país, que forma parte del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), ha actuado «como miembro responsable» y ha ejercido su derecho a la energía nuclear pacífica «con total transparencia».
Además, señaló que «pese a décadas de sanciones ilegales, asesinatos de científicos nucleares y ahora bombardeos directos de nuestras instalaciones», Irán no ha violado el TNP.
Y subrayó que el país respondió «de buena fe» a las negociaciones nucleares propuestas por EEUU a principios de este año, que se estancaron tras la guerra de doce días con Israel en junio, en la que intervino también Washington con ataques contra tres de sus instalaciones atómicas.